'Los Nuevos Vengadores: Illuminati', desde el principio de los tiempos

Hablar de los Illuminati siempre ha traído consigo una serie de conceptos que, para que nos vamos a engañar, terminan por llamarnos la atención al asociarlos con ideas relacionadas con organizaciones secretas y clandestinas que tienen cabida en cualquier buena historia que se quiera contar. Desde finales del siglo XIX están dando guerra estos conspiradores en la sombra y no han sido pocas las veces que se han incluido en tramas de todo tipo. En La Casa de las Ideas no iban a ser menos y sería durante el reinado de Brian Michael Bendis, Marvel gozaría de la presencia de sus propios Illuminati. Un grupo de lo más variado y ecléctico que haría su debut en el número 7 de ‘Los Nuevos Vengadores‘ del guionista de Cleveland y en cuyas filas podríamos encontrar a Charles Xavier, Tony Stark, Rayo Negro, Reed Richards, Stephen Strange y el Príncipe Namor. Una formación con nombres importantes y cuyas decisiones implicaban, por ejemplo, exiliar a Hulk a un planeta alienígena (‘Planet Hulk / World War Hulk‘). Para terminar de darle el empujón definitivo (y merecido) tendrían su contrapartida cinematográfica como ya vimos en ‘Doctor Extraño: En el Multiverso de la Locura‘. Obviamente, con unos mimbres así, el no aprovechar una idea tan morrocotuda era poco menos que un crimen, algo a lo que se puso solución en el año 2006 con la aparición de una miniserie que Panini ha tenido a bien recopilar en este ‘Marvel Must-Have Los Nuevos Vengadores: Illuminati‘ un volumen que nos va a mostrar distintas visiones de eventos de importancia que han acontecido en el Universo Marvel de toda la vida.

Se pueden hacer una ligera idea de lo que les espera y les ofrece la lectura de esta miniserie, un guión repleto de datos del pasado que esperan para ser recontados por un guionista, Bendis, al que no le importa zambullirse en la retro-continuidad de cualquier personaje o formación para contar lo que quiere. Tras todo lo que ocurría en el mítico arco ‘Vengadores: Desunidos‘ y los posteriores eventos marvelitas (‘Dinastía de M‘ o ‘Civil War‘), las distintas cabeceras volvían a dar la impresión de ser un universo cohesionado, lo que acontecía en un título tenía una repercusión global y extensiva en el resto. Era necesario la creación de un grupo como estos Illuminati que conectarán el pasado más remoto de la editorial con los acontecimientos más recientes. De esta manera vamos a ser testigos de excepción de cómo este misterioso grupo estuvo implicado en ‘La Guerra Kree-Skrull’, en la saga ‘El Guantelete del Infinito‘ y en el destino que tendrían algunas de las gemas, en las añoradas ‘Secret Wars‘ se las verían con El Todopoderoso al igual que con la creación de Grant Morrison, Marvel Boy. Pero si hay que resaltar un capítulo en concreto ese es el dedicado a ‘Invasión Secreta‘, veinticuatro páginas llenas de tensión e intriga que desembocan en uno de los finales más impactantes que hemos podido leer en los últimos años. El ritmo que imprime Bendis desde la primera página es frenético, siendo imposible dejar de leer las páginas de manera compulsiva, sumergiéndonos en la historia de manera total mientras que nos deleitamos con las páginas ilustradas por un Jim Cheung en estado de gracia (atención a los pasajes en los que hay batalla por medio). Deja con ganas de más, de mucho más. Es el efecto secundario de consumir el mejor Bendis. Lo puedes odiar o lo puedes amar, pero no deja indiferente a nadie.