Entretenida hasta decir basta, ‘Planeta Hulk‘ terminaba de forma muy contundente con Greg Pak tomando decisiones dramáticas para la vida del alter ego de Bruce Banner. Un alter ego que había sido expulsado del planeta por los Illuminati, que había ido a parar al otro confín del universo, que había reconstruido su vida allí encontrando por fin un lugar en el que ser respetado y no perseguido, formando incluso una familia y que, en las páginas finales, veía que todo le era arrebatado de la manera más brutal posible, decidiendo entonces regresar a la Tierra para acabar con aquellos a los que hacía responsables de su miseria…los héroes que lo habían enviado allí. Así las cosas, la doble splash-page del ‘Hulk‘ #105 —en la numeración original USA, claro— mostraban al coloso esmeralda a lomos de una nave espacial, espada en mano, rumbo a su planeta natal con la clara misión de acabar con las vidas de Reed Richards, Xavier, Namor, Rayo Negro, Tony Stark y el Doctor Extraño. Y en ese mismo lugar es donde arranca la acción —la acción imparable, cabría apostillar— de este ‘World War Hulk‘, una secuela que empezaba dos meses después de que ‘Planeta Hulk’ y que, al contrario que esta, que servía a Pak para desarrollar a fuego lento muchas tramas y personajes, dedica sus íntegros esfuerzos a intentar —y conseguir, no cabe duda— epatar al lector con unas secuencias de acción que ríase usted de cualquier cosa que haya visto antes en la serie de «la Masa».
De hecho, consciente de lo que acarrea las decisiones que ha puesto en boca del protagonista, Pak se abandona por completo a que ‘World War Hulk’ sea lo más parecido a una cinta de acción pura y dura que puedan albergar unas viñetas y, a lo largo de las casi 300 páginas que aquí nos presenta Panini en un Marvel Must-have que complementa al que dedicó a la primera parte de la historia, lo que prima es la épica sin límites, las batallas en las que cualquier cosa es posible y la pirotecnia de mayor artificio que uno pueda imaginar. Sí, hay diálogos, y si bien están colocados con enorme precisión, son tan escuetos que cabría plantearse hasta que punto podría el guionista haber experimentado a placer con este evento y haber prescindido de ellos para que todo lo que se nos presentara ante nuestra atónita mirada fuera violencia, muerte, destrucción y algo más de violencia, descarnada a ser posible…bueno, todo lo descarnada que un tebeo Marvel hubiera permitido, claro.
Pak añade al conjunto, por si asistir al masivo espectáculo que son las páginas de John Romita Jr. no fuera suficiente, una sensación constante de no saber por qué derroteros va a tirar el relato y si, por primera vez, La Casa de las Ideas va a dar rienda suelta a uno de sus guionistas para ajusticiar de un puñetazo al dichoso status-quo, llevándose Hulk por delante al héroe que se le ponga. Vale, por muy presente que dicha sensación esté, sabemos que por mucho que aquí se destroce esto es el Universo Marvel y nada permanecerá alterado por mucho tiempo antes de volver a sus fueros, pero que dicha sensación sea la tónica reinante ya habla, y de qué manera, de lo que tenemos entre manos en este volumen. Un volumen que no hubiera sido el mismo —obviedad de perogrullo, lo sabemos— de no haber venido dibujado por un Romita Jr. que se deja la piel en dotar a cada puñetera viñeta de una épica incontenible y que, junto con ‘Planeta Hulk’, conforma una dupla que se alza, a nuestro juicio, como lo mejor que Greg Pak ha sido capaz de desarrollar para Marvel a lo largo de su extensa tebeografía para la editorial. Ahí es nada. ‘Nuff said!!!!
World War Hulk
- Autores: Greg Pak y John Romita Jr.
- Editorial: Panini
- Encuadernación:Cartoné
- Páginas: 264 páginas
- Precio: 18 euros