Este 2021 ha sido, en lo personal, el año en que por fin he podido poner en marcha —y casi llevar a término— un proyecto largamente acariciado: incorporar álbumes en francés al ritmo normal de lectura mensual y, asociado con esto, sustituir todo lo que de francobelga tenía en mi tebeoteca por sus contrapartidas «originales». Como podréis imaginar, no ha sido un proceso rápido —ni barato—, pero firme defensor como soy de leer y ver las cosas en versión original, llegar a este punto era sólo cuestión de tiempo —lástima que, a estas alturas de mi vida, y con la carga de trabajo que tengo encima, no pueda plantearme hacer lo propio con el italiano y el japonés…que voy a dejar ahí como proyectos para la jubilación.
Así las cosas, varios de los títulos que hoy os incluímos en esta selección fueron consumidos con avidez en su idioma original antes de que, meses después, aparecieran por mano de la editorial española que los ha traído en castellano, y sólo cinco de los 24 que encontraréis a continuación permanecen inéditos en España. Es firme intención que, de cara al año que viene, dicha tónica aumente y que seamos capaces de anticiparnos, como siempre hacemos con el material USA, a lo que termine apareciendo, o no, por estos lares.
Novedad también en esta edición de Lo Mejor de Fancueva, es que, con la incorporación de nuevas caras en la página, hemos contado con Elena para que nos traslade cuáles han sido sus lecturas favoritas del año, sumándolas a la selección para que haya más variedad que la que servidor puede dar. Algo que ya encontrábamos ayer de manos de Mario, que también encontraremos en el artículo de mañana sobre el tebeo español y que, confiamos, sea de vuestro agrado.
Azimut
Nos fascinó lo extravagante y surrealista de su guión pero, aún más, el EXTRAORDINARIO dibujo de Jean-Baptiste Andreae, todo un dechado de singulares virtudes que hacían de la lectura del integral publicado por Ponent Mon una gozada constante.
Brindille
Ya dijimos que lo que el guión de Frédéric Brrémaud para este álbum publicado por Nuevo Nueve dejaba muchísimo que desear pero, dada la imposible belleza de lo que cabía encontrar en las páginas de Federico Bertolucci, no nos salía dejar fuera a ‘Brindille‘ como una de las mejores BD del año aunque sólo sea, como ya dijimos en su momento, por dejarnos embelesar hasta el dolor más dulce posible gracias a unas ilustraciones que no son de este mundo.
Deadwood Dick. Black Hat Jack
Vale, técnicamente no es BD sino Fumetto pero, como quiera que no tenemos un apartado exclusivo en el que incluir al cómic italiano, metemos aquí a esta, la que ya dijimos que era MEJOR aventura de las tres que, hasta el momento, nos había presentado Panini con Deadwood Dick como protagonista.
Elric vol.4
Culminación, no sólo del primer arco argumental de esta extraodinaria adaptación del cosmos creado por Michael Moorcock, sino de un larguísimo proceso creativo que ha tardado ocho largos años en cuajar los cuatro álbumes que ha publicado Yermo, tenemos que rendirnos ante la evidencia de que lo que han planteado Julien Blondel, Jean-Luc Cano y Julien Telo recoge de forma completa y aumenta sobremanera toda la épica de las novelas originales.
El reino de Blanca Flor
Derroche de simpatía por los cuatro costados, este cuento cargado de reflexiones sobre la naturaleza humana nos devolvía, al menos en castellano, a un Benoit Feroumont al que, esperemos, no tardemos en volver a encontrarnos si Nuevo Nueve tiene a bien publicar los álbumes de ‘Le Royaume‘.
En la cabeza de Sherlock Holmes (selección de Elena Peñuelas)
Cómic capaz de enganchar tanto a los fans del personaje como a los que simplemente quieren disfrutar de un buen misterio. Sus planchas planificadas al máximo en las que ningún detalle es gratuito consiguen llevarnos al complejo cerebro del rey de los detectives…y dejarnos con ganas de quedarnos ahí.
Generaciones
Reciente en nuestra memoria su lectura, y aún más reciente la de ‘Tiempos precarios’ que hicimos tras descubrir que no era esta la primera obra de Flavia Biondi que nos traía La Cúpula, sólo podemos insistir en la grandeza de este trabajo y en el gran regalo que supondrá para cualquiera al que se lo obsequiéis.
Ghost Money
Fue mucho lo que vibramos con este thriller semi-futurista y muy tecnológico que nos trajo Norma en un único volumen, y teníamos claro, nada más terminarlo, que iba a estar sí o sí entre los elegidos del año.
Gung Ho
Con un único álbum publicado hace cuatro años por Dibbuks, ‘Gung Ho‘, la extraordinaria ficción post-apocalíptica que firman Benjamin Von Eckartsberg y Thomas Von Kummant, ha llegado este 2021 a su fin, cerrando con su quinta entrega una historia magnífica en la que han ido teniendo igual importancia tanto sus soberbios personajes como la construcción del mundo o, por supuesto, un hilo argumental que no ha hecho sino crecer en intensidad conforme avanzaba. Esperemos que, en algún momento del futuro, alguien retome la publicación en castellano y permita finalizar esta enorme serie a los lectores no muy duchos en el idioma de Baudelaire.
La adopción
Echábamos de menos al Zidrou que va directo al corazón —aunque no mucho, que para eso seguimos teniendo entrega anual de ‘Los buenos veranos‘ (genial la de este 2021, por cierto); ese que nos ha conquistado una y otra vez con sus historias cargadas de sentimiento y de personajes tridimensionales que, de vuelta en este enternecedor relato, logra arrancar sentidas lágrimas, un hito que, sinceramente, no está al alcance de cualquiera.
La bomba
Si no fuera por aquél que, finalmente, ha terminado alzándose con la distinción a Mejor BD Europea de 2021, tened muy claro que hubiera sido este ‘La bomba‘, ambiciosa y muy apasionante reconstrucción de todo lo que desembocó en la creación de la primera bomba atómica, el que se hubiera alzado indiscutible con el galardón.
La horda de contraviento
Habiendo leído hace pocas semanas el tercer álbum de esta superlativa serie de ciencia-ficción, sólo puedo confirmar lo que adelantábamos en la reseña que le dedicamos al volumen en el que Yermo recogía los dos primeros: que nos encontramos ante uno de esos títulos de riqueza inabarcable que engalanan cualquier tebeoteca en la que se encuentren.
La tierra, el cielo, los cuervos
Adoramos cualquier cosa que salga de las prodigiosas manos de Teresa Radice y Stefano Turconi. Y si encima se sitúa en la Segunda Guerra Mundial, pocos argumentos nos faltaban para meter a esta fabulosa historia en la presente selección.
Le Château des Étoiles vol.6
Otra serie que llega a su fin y que, afortunadamente, si nos está trayendo Norma de forma puntual, ‘El castillo de las estrellas‘ de Alex Alice concluye de manera espectacular esta historia en la que el artista francés ha ido superándose álbum a álbum. Toda una cima de la BD francobelga que deja el listón muy alto para lo que sea que el artífice de ‘Siegfried‘ esté preparando a continuación.
New York Cannibals
Era, como creo que comentamos en la reseña, la secuela que no sabíamos que queríamos pero que todos los que habíamos leído ‘Little Tulip‘ necesitábamos. François Bouqc desatado en un relato que, anclado en las sucias calles de Nueva York, no renuncia a cierta componente mágica. ¿Se puede pedir más?
Noir Burlesque
Cualquier cosa que lleve el nombre de Enrico Marini —como dibujante, claro…pero más aún si es en el doble papel de guionista y dibujante— se incorpora automáticamente a la tebeoteca. Ese es el nivel de lo que nos apasiona el trabajo del italiano. Y, claro, si a esa pasión le sumamos nuestra filia por el noir, la adquisición de ‘Noir Burlesque‘ era, como suelen decir los anglosajones, un no brainer. Relato típico del género con una femme fatale absoluta y un macho bogartiano aún más absoluto, este primer volumen de los dos que compondrá la historia es una muestra asombrosa del estilo de Marini y de su control sobre un color que, apagado salvo por el naranja fuego del pelo de la protagonista, encuentra aquí nuevas cotas.
Oleg
Mi compañero Mario se encargó de esta reseña cuando tendría que haber sido MÍA por meras cuestiones de tiempo y planificación de la página. Pero que conste que, no sólo suscribo cada una de sus palabras y signos de puntuación o lo elocuente de un titular que ya decía mucho acerca de lo penúltimo de Frederik Peeters, es que, a día de hoy, no tengo claro si estamos ante lo mejor que ha parido el suizo. Ahí lo dejo.
Piel de hombre (selección de Elena Peñuelas)
Cuento para niños grandes, de delicado dibujo pero ácido trasfondo, tocando temas como la igualdad y la libertad sexual sin importar los siglos que no separan de esta Toscana renacentista de postal en la que una joven descubre como conocer íntimamente a su prometido con un mágico disfraz de chico. Una trama original sin pelos en la lengua.
Psicoinvestigador
Aunque aún no hemos publicado nuestras impresiones sobre ella, os adelantamos que el volumen publicado por Ponent Mon con los dos álbumes de la serie es un auténtico descoque visual y que la historia, con un protagonista que parece el imposible hijo bastardo entre Sherlock Holmes y Charles Xavier, es todo un logro por parte de su guionista, Benoît Dahan. Lástima que, por lo que sabemos, la serie no haya tenido continuidad en el mercado francés.
Revolución
Rico y complejo, el primer volumen de este fresco sobre la Revolución Francesa que nos ofrecía Planeta nos dejaba completamente extasiados, tanto por lo intrincado de su urdimbre argumental como por un dibujo superlativo en su capacidad expresiva y lo portentoso del uso del color. Deseando ya que caiga la siguiente entrega en nuestras manos.
Saint-Elme 1
Como bien indica el texto que le dedicamos en hace poco más de tres años, fuimos de los que apreciamos sobremanera lo que Serge Lehman y Frederik Peeters pusieron en pie con ‘El hombre garabateado‘ así que, con ese referente, ni lo dudamos a la hora de hacernos con este primer volumen de su nueva serie, un thriller que desvela muy poco en estas ochenta páginas pero que engancha más que de sobra, sobre todo por la construcción tan extraña que hacen los autores de las localizaciones en las que se mueve y, aún más, por lo enigmático de sus personajes. Además, cuenta con el valor añadido de poder contemplar a Peeters en color, que no es habitual.
Saqueo
De Peeters a Peeters y ya van tres. No era un cómic propiamente dicho, pero el experimento narrativo que Frederik Peeters se sacaba de la manga con este álbum respondía perfectamente al término FASCINANTE. Eso, y que es Peeters, ya debería ser suficiente aliciente para acercarse al trabajo más singularmente distinto del artista suizo.
Tananarive
Desde que lo descubriera en esa obra maestra que fue ‘Érase una vez en Francia‘, Sylvain Valleé se ha convertido en otro de esos nombres cuyos trabajos, como decíamos más arriba con Marini, terminan incorporándose a la tebeoteca en cuanto uno puede. Este relato de un notario que, jubilado, emprende una pequeña gran aventura, y que Valleé dibuja con su categoría habitual, es de esos que, a lo Zidrou, cala hondo en el lector por el despliegue de corazón y sentimientos que imprime en nosotros. Desconozco si alguien lo publicará en español pero, si sale, lanzaos prestos a por él.
Último aliento
Sin palabras y con una energía furiosa e imparable, Thierry Martin cosía una anécdota típica de western en un álbum que deja al lector como reza el título con sus páginas completas y un blanco y negro fabuloso.