Hay matrimonios que, inesperados y a priori hasta imposibles, provocan gran emoción cuando son anunciados. Y el de Tillie Walden con el universo de ‘The Walking Dead‘ que se iba a dar cita en este proyecto llamado ‘Clementine‘ del que ECC publica su primera entrega, era una de esas uniones que concitaba, como mínimo, una enorme expectación. En primer lugar, de manera muy obvia, porque los que estuvimos pegados al papel durante 16 años cada vez que la colección de Robert Kirkman llegaba a nuestras manos, siempre querremos volver al fértil universo que el guionista estrella de Image construyó en torno a ese mundo asolado por zombis. Sí, la historia que Kirkman urdía quedaba perfectamente cerrada y, a nuestro parecer, es una obra maestra indiscutible del noveno arte que, aunque algún bajoncillo de ritmo tuvo —a ver qué obra desarrollada durante tres lustros no conoce algún pequeño bache— siempre se las apañó para ir a más y, sobre todo, para cerrar de manera maravillosa lo que podía haber quedado completamente arruinado, como hemos visto tantas y tantas veces, por una conclusión menos madurada. En segundo lugar porque, como ya sabéis si sois habituales de esta vuestra página, Tillie Walden es uno de esos nombres que nos hace flaquear las rodillas y pensar que la autora de ‘En un rayo de sol‘ o ‘Piruetas‘ fuera a trasladar su saber hacer a un universo tan rico, sí, pero tan completamente opuesto a aquellos en los que se lleva moviendo desde sus inicios, era justificación más que suficiente para que esa expectación de la que hablábamos más arriba se elevara hasta cotas de considerable calado.
Podréis entender pues que, una vez pudimos dar cuenta de lo que Walden hace aquí con ‘Clementine’, dicha anticipación se transformara en cierta decepción por cuanto lo inesperado y excitante de esa imposible unión entre la autora y los muertos vivientes nos devuelve un producto que intenta en todo momento moverse a caballo entre la fuerte personalidad y los tropos de la artista californiana y aquello que uno asociaría a lo que las vidas de Rick, Michonne, Carl, Carol, Maggie y compañía llegaron a ofrecer durante aquellos maravillosos años en los que ‘The Walking Dead’ formó parte mensual imprescindible de la parrilla de Image: ‘Clementine’ parte de la premisa de tomar a la querida protagonista femenina de uno de los videojuegos de ‘The Walking Dead’ y ofrecerle la oportunidad al personaje de crecer más allá de lo que Telltale Games ofrecía a sus usuarios en un relato que, en cierto modo, es 100% Walden pero que, al tratar de conservar la esencia de la autora, chirría en sus goznes con ese mundo post-apocalíptico en el que se movía Kirkman.
De hecho, creemos que ‘Clementine’ habría funcionado mucho mejor de no haber contado con el handicap de situarse en los entresijos de la creación del guionista y, aún así, también somos de la opinión que incluso como relato ajeno al mismo, no termina de cuajar como si lo hacen los anteriores ejemplos de la obra de Walden. Quizá sean unos personajes secundarios con los que nos cuesta empatizar, quizá sea una acción que, deslavazada en su mayor parte, carece del empaque suficiente para engancharnos desde el comienzo, quizá sea ese ritmo algo letánico que nunca parece querer arriesgar a dar un golpe de efecto o pisar un pelín más el pedal para transmitir sensaciones que nos saquen de la enorme distancia que, poco a poco, termina abriéndose entre lector e historia…sea como fuere, y a pesar de que, en términos gráficos, ‘Clementine’ nos convenza tanto como cualquiera de los tebeos que ya le hemos leído a la artista, es este un proyecto lo suficientemente fallido como para que, en el momento en que continúe, no haya suscitado el interés necesario para que queramos seguir acompañándolo.
Clementine vol.1
- Autores: Tillie Walden
- Editorial: ECC Ediciones
- Encuadernación:Rústica
- Páginas: 240 páginas
- Precio: 23 euros