‘Caso para dos’, los Salinger en grapas

Acostumbrados como estamos a que haya sido el formato por excelencia del cómic de superhéroes, encontrarnos una «grapa» dando cobijo a un título europeo es toda una rareza digna de encomio. Si, además, dicha rareza viene firmada por Anthony Pastor (autor de las excelsas ‘Castilla Drive’ y ‘Caramelos atómicos’) e incide, como no podía ser de otra manera, en seguir abundando en el apasionante universo del pueblo de Trituro y de esa detective a la fuerza que es Sally Salinger, entonces el encomio es tan obligado como merecido.

Y aún diría más, ya que, cuando uno abre las páginas de este «BD-book» editado por La Cúpula y comienza a asistir a un despliegue artístico espectacular, es cuando se apercibe la verdadera singularidad de las 36 páginas con las que Pastor nos traslada algo más de tres lustros en el pasado de Sally Salinger para presentarnos cómo era su vida antes de que su marido la abandonara, dejándole deudas y una profesión a la que dedicarse de forma obligada. Si sois de los que nos habéis hecho caso y os habéis dejado seducir por los títulos citados arriba, podréis apreciar el cambio de estilo tan alucinante que sufren los lápices del artista hispano-galo, con unas viñetas que están mucho más trabajadas y detalladas que las que podíamos ver en cualquiera de los dos volúmenes publicados hasta el momento.

El talante diferenciador que este cambio aporta a la lectura, haría de ‘Caso para dos’ una compra obligada; pero es que, al margen de la maestría visual que el autor demuestra en cada página (en muchas ocasiones el uso del rayado me recordaba a Crumb), lo que aquí podemos encontrar desde el punto de vista argumental es, incluso en una extensión tan reducida, un perfecto ejemplo del perfecto dominio que Pastor tiene sobre el género polar (nombre que recibe el policíaco/negro al otro lado de los Pirineos), planteando una historia que, al tiempo, resulta tanto auto-contenida (no hace falta haber leído ningún trabajo previo del artista para poder aprehenderse a la perfección de lo que aquí se narra) como reveladora con respecto a los «orígenes» de la Sra. Salinger. Lo dije hace unos meses y lo vuelvo a repetir: Pastor le tiene perfectamente cogido el pulso al pequeño cosmos que ha creado y, bajo mi punto de vista (aún a riesgo de poder encasillarse, que lo dudo) no debería abandonar las mugrientas calles de Trituro. El tiempo dirá.