'Amazing Fantasy', Kaare Andrews en tierra de nadie

Supongo que no seré el único que opine que Kaare Andrews es uno de esos artistas que siempre dejan con la boca abierta con cada nuevo trabajo por más que su presencia en el mundillo del noveno arte sea, como poco, irregular. De hecho, un vistazo a su carrera revela que, al margen de las mil y una cubiertas a las que ha regalado su muy personal y magnífico estilo, son pocos los ejemplos de cierto recorrido en los que hemos podido disfrutar de su buen hacer. Vamos, que así de memoria os citaría el ‘Spiderman: Reino’, ‘Puño de Hierro‘, su discreta participación en ‘Astonishing X-Men‘ o la reciente miniserie de creación propia, ‘e-Ratic‘, publicada al amparo de AWA Upshot. Y, sin embargo, a pesar de lo limitado de su trayectoria, Panini nos sorprende, y mucho, eligiendo el formato Treasury en tapa dura —el mismo tamaño en el que publicaran, el pasado año, el primer volumen de los Eternos de Kieran Gillen—, esto es, dimensiones similares a las de un álbum europeo en altura y algo más estrecho que éstos, encuadernación holandesa y, sobre todo, la impresión mate sobre un papel de tremendo gramaje. Vamos, lo mismo que dijimos a comienzos de año sobre el citado tomo de ‘Los Eternos’: un libro que grita «¡objeto de coleccionista!» a la legua.

Y, casualidad algo sorprendente, volvemos a tener un producto entre nuestras manos en el que la calidad de la edición elegida no concuerda para nada con la de la historia que contiene. Sí, no hay duda alguna ante lo magnífico del trabajo de Andrews a los lápices, las tintas y los colores, que el canadiense es un maldito todo-terreno y se arropa aquí del término autor completo hasta sus últimas consecuencias. Sí, nos deja maravillado su versatilidad y el diferente tratamiento que da a las páginas que, en el primer y el último número, vienen protagonizadas por los tres héroes de esta aventura pulp —el Capi, Viuda Negra y Spiderman—. Y sí, es incuestionable que sabe como narrar, como plantear la página de manera espectacular y como asombrarnos una y otra vez con la variedad de sus herramientas visuales. Peeeeero….

…todo lo que Andrews corona en el aspecto visual —atención al material extra incluido en la edición de Panini y a esa aventura de Lobezno que homenajea, sin tapujos, al ‘Elektra Lives Again‘ de Frank Miller— no es capaz de rubricarlo en una historia deslavazada, que le tira los tejos a demasiados frentes y que, al hacerlo, no consigue llegar ni al notable en muchos de ellos. De entre ellos, de entre esos muchos frentes que abre, nos interesa mucho lo que Andrews tiene que decir con respecto a Peter Parker y al Tío Ben, pero mucho menos lo que hace con Steve Rogers o la deriva hacia la «fantasía heróica» a la que somete, no sólo al Capi y a Viuda Negra sino a todo un conjunto que, insistimos, no convence por la endeblez de su construcción. Es bien evidente que habrá quienes piensen todo lo contrario al asomarse a este hermoso volumen más, por lo que a nosotros respecta, es uno de tantos que nada aporta al total del Universo Marvel. ‘Nuff said!!!!