'100% Marvel HC Capa y Puñal: Hombres y Bestias', despedida y cierre para la pareja más callejera de Marvel

Con la aparición de este ‘100% Marvel HC Capa y Puñal: Hombres y Bestias‘ toca frotarse los ojos para despejar las últimas gotas de incredulidad que quedaban ante la idea de ver publicado en nuestro país todo el material protagonizado por los héroes callejeros / urbanos por excelencia de La Casa de las Ideas. Parece que Panini se está tomando muy en serio eso de no dejar colecciones abiertas sin finalizar y volúmenes como éste significan un golpe de autoridad en la mesa que acalla cualquier crítica que pueda aparecer sobre ello. Una nueva entrega que supone el cierre definitivo (ya no queda más material que publicar) a unos tebeos que, de otra manera, hubiese sido imposible que vieran la luz. ¿El contenido? Se da carpetazo a la serie regular rebautizada como ‘The Mutant Misadventures of Cloak and Dagger‘ (aunque para los últimos números se volvería al título original) y se incluye el cruce con el Doctor Extraño de Peter B. Gillis y la novela gráfica inédita ‘Refugio de la Tormenta‘ en la que comparten protagonismo con los chavales de Power Pack. Si hacemos un poco de memoria, en la anterior entrega dejábamos a Terry Austin desempeñando labores de guionista y enfrascado en una lucha personal por dotar de cierta importancia y trascendencia todo lo que estaba haciendo.

Este nuevo volumen se abre, precisamente, con el final de su etapa, unos cómics donde el tono predominante es el de un culebrón al uso, imitando todo lo que estaba causando furor en la franquicia mutante. El guionista / entintador de Michigan se decantaba por aportar continuos infortunios entre los personajes (de ahí el título original de la serie), ya se sabe que las desgracias siempre han sido algo que han atraído al lector de turno. ¿No se lo creen? Puñal ciega, Mr. Trampa acechando a la pareja protagonista y el Doctor Muerte haciendo de las suyas. No está nada mal para unos trece tebeos en los que Austin hace todo lo posible por dar un significado a cada cosa que acontece, aludiendo continuamente a todos estos hechos con el fin de dejar bien claro que estamos ante una historia cerrada y cohesionada, nada de números sueltos de relleno. Su salida del título significó la llegada de un nombre clásico de la editorial, el creador de Howard el Pato, Steve Gerber. El guionista, que ya había tenido buenas aportaciones en Daredevil y Los Defensores,, desarrollaría una trama en la que la pareja de héroes se las tendrá que ver con un grupo de nazis. Un intento desesperado por aumentar las ventas de un título que estaba con el agua al cuello.

Nadie puede echarle en cara que no pusiera todo de su parte para que la cabecera aguantara un poco más. Invitados de gran calado como Spiderman o El Motorista Fantasma y villanos grandilocuentes como Mefisto. Incluso se incluyó un cruce con la mítica saga de El Guantelete del Infinito aunque, entre nosotros, la influencia es tan leve que se intuye gracias al banner de la portada. El último número, ya con Gerber fuera de la colección, estará guionizado por otro hombre de la casa, Terry Kavanagh, nos deja un relato de doble extensión con D´spayre como villano y haciendo todo lo posible por aclarar el origen de la pareja. Aunque habría que aclarar que, viendo lo que le quedaba a la colección, se trata más de una artimaña editorial que otra cosa. Eso sí, funciona de maravilla para enlazar con lo narrado en el primer volumen y dejar al lector con una sensación de haber leído algo con una estructura circular. El volumen se completa con la novela gráfica mencionada un poco más arriba, un guión de Bill Mantlo que advierte del peligro que supone para los jóvenes el huir de sus hogares debido a conflictos familiares. Unas historias muy bien ejecutadas que tendrán al habitual Rick Leonardi como dibujante titular pero que será ayudado y reemplazado por otros artistas como David Ross, Chris Ivy, Chris Warner o Sal Velluto. Cinco tomos con los que se salda una deuda que jamás pensamos poder cobrar. Buen detalle por parte de Panini.