Como vimos en la primera parte de este post, tras largos debates tanto entre los senadores como entre los editores, ese mismo año, el 26 de Octubre de 1954 se instituyó el Comics Code. Como el senado había pedido la autorregulación voluntaria de los contenidos de los comics, el Comics Code tenía por tanto carácter voluntario. Ideal de no ser por el hecho de que las principales empresas de distribución se negaban, en muchos casos, a distribuir comics sin el sello de aprobación.
Una política semejente tenían los vendedores de comics, que sólo realizaban pedidos de aquellos comics que tuvieran el sello, ya que de lo contrario podrían tener problemas, no legales, si no más bien vecinales, y es que nadie quería ser responsable de perturbar las mentes de los dulces e inocentes infantes. En este segundo artículo dedicado al Comics Code Authority voy a hablaros de los artículos del código y de las consecuencias de su implantación.