Segundo volumen que, con la Segunda Guerra Mundial de fondo, nos ofrecía Norma el pasado mes de diciembre, ‘The Regiment’ es una fidedigna, precisa y apasionante reconstrucción de los hechos que llevaron a la formación del SAS, el Servicio Aéreo Especial del ejército británico que fue ideado como unidad de élite dedicada a la guerra de guerrillas y que, desde sus inicios en el frente sahariano en 1941, se ha convertido en modelo a seguir para la instrucción de fuerzas de élite alrededor del mundo. Esa épica que sin duda acarrea el acercarse a tan legendaria división del ejército británico, es la que marca con cierta intensidad el discurrir de tres álbumes que, reunidos bajo un único integral, exploran con mucho ahínco la cara humana del SAS para que, tras breves compases, el lector sienta como suyos a cualquiera de los tres protagonistas principales, responsables de la fundación del grupo y descritos por parte de Vincent Brugeas con un carisma a prueba de bombas.
La implicación que de forma temprana se siente hacia cualquiera de ellos ayuda sobremanera a pasar por alto la considerable cantidad de datos y nombres que maneja la historia y, dejando de lado ese sesgo ciertamente documentalista de la narración, ‘The Regiment’ se alza como uno de los mejores tebeos bélicos que hemos tenido el gustazo de leer, no en los últimos tiempos, sino casi en nuestra ya dilatada experiencia en el mundo del noveno arte. Que Brugeas sepa equilibrar a la perfección exposición y acción o que cada «actor» de la historia tenga voz propia y distinguible son sólo valores que, situados en lo alto de la pirámide, encumbran un ritmo fantástico, una reconstrucción de los hechos que nunca se antoja aburrida o superficial e, insistimos, una épica que, sin necesidad de echar mano de manera constante de recursos facilones —léase grandes gestas militares o espectaculares secuencias de enfrentamientos armados— se deja palpar desde la primera a la última página.
Y ahí entra en liza un Thomas Legrain que, aunque coquetea aquí y allá con las referencias fotográficas de cara a concretar a sus personajes —es indudable que a la hora de dar forma a David Archibald Stirling, el principal instigador en la formación del SAS, el artista se ha servido de Liam Neeson—, se deja la piel, ya en que sus «actores» no caigan en el hieratismo que hemos observado muchas veces cuando se recurre a las citadas referencias; ya en que la reconstrucción histórica sea lo más pegada posible a la realidad —y ahí tienen mucho que decir el asombroso realismo que gastan los vehículos y uniformes—; ya en incluir, de cuando en cuando, páginas dobles llamadas a dejarnos perplejos y a servir de eco cercano de esa épica tan bien entendida que desarrolla Brugeas en el guión. La soberbia coreografía que plantean ambas mitades del tebeo hacen de ‘The Regiment’ una lectura espectacular, llena de matices y fácilmente podría haberse colado en lo mejor de 2020 de haber tenido la oportunidad de leerla antes de que el año tocara a su fin. Recomendable es decir poco.
The Regiment
- Autores: Vincent Brugeas y Thomas Legrain
- Editorial: Norma Editorial
- Encuadernación: Cartoné
- Páginas: 196 páginas
- Precio: 32 euros