‘Superman/Batman: Enemigos públicos’, diversión palomitera

El presente volumen recopila los primeros 13 números de la cabecera mensual protagonizada por los dos mayores héroes del Universo DC: Superman y Batman. Dos personajes que siempre suelen funcionar muy bien juntos, gracias a los contrastes y coincidencias entre sus respectivas personalidades. Dos visiones distintas de la justicia, dos maneras diferentes de combatir el mal, pero un objetivo común: defender a los inocentes de aquellos que intentan hacerles daño. El guionista Jeph Loeb sabe jugar muy bien con esta dicotomía, y así lo demuestra a lo largo de este tomo en el que trabaja con tres dibujantes cuyos estilos también contrastan notablemente entre sí.

El primer arco argumental de la serie ocupa seis números y nos ofrece un relato de acción superheroica en estado puro. Loeb se aleja del tono reposado y basado en el estudio de personajes de los magníficos cómics que firmó con Tim Sale —’Superman: Para todas las estaciones’, ‘Batman: El largo Halloween’, ‘Daredevil: Yellow’, etc.— para acercarse al pijameo más desenfadado con peleas de alto voltaje y un sinfín de héroes y villanos que se dejan ver por estas páginas: Lex Luthor, Metalo, Mongul, Power Girl, Katana, Capitán Marvel, Hawkman… El detonante de todo esto es un asteroide de kryptonita, formado a partir de los restos del planeta natal de Superman, que se dirige directamente contra la Tierra. Luthor, que en aquella época era el presidente de EE.UU. (sí, sí, reiros, pero ya veréis como salga Donald Trump…), pone en marcha un plan por el que implica a Superman en este suceso, y tanto él como Batman tendrán que enfrentarse a la oleada de héroes y villanos que saldrán en su busca. Diversión pura y dura con un excelente dibujo firmado por Ed McGuinness, cuya expresividad y dinamismo son el complemento perfecto para el guion de Loeb.

Llegados al ecuador del volumen, nos encontramos con un número de transición que nos transporta hasta Tokio, donde Superman y Batman ceden el protagonismo a Robin y Superboy, que se meten en una pelea de mechas en la más pura tradición nipona. No es de extrañar, por tanto, que eligieran a Pat Lee para dibujar este número, dada su experiencia con los Transformers. Eso sí, a la hora de dibujar fondos es un poco vaguete el chaval…

El tristemente fallecido Michael Turner tomó el relevo de Lee en los lápices para ilustrar el siguiente arco: “La superchica de Krypton”. Resulta que dentro del meteorito que cayó en la historia anterior había una persona, concretamente una chica, que afirma llamarse Kara Zor-El y ser superviviente del planeta Krypton. Superman, movido quizá por el deseo de no ser el único kryptoniano, no tarda en creer lo que dice la joven, pero Batman no lo tiene tan claro. La duda se irá resolviendo conforme avanza esta historia, que también cuenta con un puñado de invitados estelares, con Wonder Woman y Darkseid a la cabeza. Concluye así este volumen pensado para los amantes de las aventuras superheroicas en estado puro, con el puntito justo de introspección y acción a raudales. Un trabajo que no es de los más personales que ha firmado Jeph Loeb, pero que cumple lo que promete: un rato de divertida evasión palomitera.