No sé vosotros, pero yo vivo mis días con música de fondo constante. Ya esté sentado delante del ordenador, en el coche, cocinando, duchándome, estudiando o leyendo —desafortunadamente, en mi trabajo actual de profesor no puedo permitirme poner nada so pena de que mis alumnos se distraigan aún más de lo que ya lo hacen—, tener música de fondo es algo que, con el tiempo, se ha convertido en indispensable y hasta necesario no ya porque me ayuda a concentrarme en aquello que esté haciendo sino porque, de un par de años para acá, sirve para anular el fuerte y agudo tinnitus que padezco en el oído izquierdo. Eso sí, como he comentado alguna vez —creo— mis gustos musicales se apartan de lo «normal» —aunque a saber qué podría calificarse como normalidad— y gustan de atiborrarse de música orquestal, ya sea la mal llamada clásica, o la compuesta para el cine y, en un sesgo algo más «popular», de revisar una y otra vez la discografía de Queen o Mike Oldfield.
Saliendo de eso, a no ser que estemos hablando de algún viaje largo con la familia en el que siempre llevamos listas de reproducción de lo más variadas con éxitos de entre los 70 y 90 —y alguna tonadilla más reciente—, poco es lo que me llama la atención la música pop y menos aún lo que conozco de ella, así que, en lugar de aproximarme con rechazo a lo que Luis Bustos nos propone en ‘POP’, un álbum a dos caras publicado por ¡Caramba!, me lancé de cabeza a su lectura considerándola una oportunidad única para adquirir conocimientos acerca de tan extenso y vasto mundo. 72 páginas después, lo primero que afirmé fue algo así como «¡MADRE MÍA!». Una exclamación que no atendía a una sino a varias razones.
La fundamental, la labor de asimilación de datos y puesta en escena que hace Bustos en unas páginas en las que, literalmente, no cabría más información: el artista nos lleva desde un punto de la música pop hasta el diametralmente opuesto, y sino fuera porque me parece virtualmente imposible que alguien tenga en la cabeza tanto nombre, dato y fecha, me aventuraría a afirmar que Bustos conocía de antemano hasta el último cantante, guitarrista y batería de cuantos son nombrados en estas páginas. Pero más allá de ella, mi sorpresa también reflejaba, de una parte, la admiración por la faceta visual del álbum, el cómo está montado todo para que nunca se haga aburrido y siempre resulte emocionante continuar y el humor soterrado con el que Bustos lo impregna todo; y, por la otra, el abotargamiento por la abrumadora cantidad de títulos y demás datos con los que el español llena textos y textos de apoyo. Más, no me entendáis por donde no es; lejos de ser una traba, si de algo sirve enfrentarse a ‘POP’, al margen de ir escuchando poco a poco todas las listas de reproducción que se han efectuado ad hoc para el álbum, es de acicate para comenzar una lenta pero segura aproximación a otras latitudes del cosmos musical humano; y sólo porque este tebeo haya logrado eso, ya merece nuestros más efusivos aplausos.
POP
- Autores: Luis Bustos
- Editorial: ¡Caramba!
- Encuadernación: Rústica
- Páginas: 72 páginas
- Precio: 19 euros en