‘Pepino. Héroe de leyenda 2: el Reino de las Olas’, aún más cuqui

Esperemos que La Cúpula no se demore en exceso —conociéndolos, sabemos que no lo harán— y podamos continuar viajando a Onirolandia, un lugar en el que, y no lo había dicho, tanto los adultos como los peques de la casa podrán pasárselo bomba por igual

Pepino. Héroe de leyenda: El Reino de la Rosquilla

Yo y mi bocaza. Tanto dármelas de creer que no íbamos a tardar mucho en poder disfrutar de este segundo volumen de las aventuras de Pepino cuando llega 2020, sobreviene todo lo que ya sabemos, y terminamos teniendo que aguardar un año para poder volver a acercarnos a Onirolandia a saber qué diantres le pasaba al pequeño conejo protagonista y a su pequeña cohorte de secundarios. Unos secundarios que aquí añaden a la irritante y muy carismática princesa del Reino de las Olas que da título a la segunda de las cuatro partes de las que por ahora consta esta fantástica saga y que, hasta cierto punto, se alzan como el plato fuerte de un tebeo que no deja de sorprendernos por su imaginación, su falta de filtros a la hora de plantear las situaciones más locas y surrealistas.

Como dije en la misma reseña que os enlazo más arriba:

(…) el trabajo gráfico de Gigi D.G es de esos que te gana por su sencillez y su candor, te sigue convenciendo por la genialidad en el diseño de este mundo imaginario y el amplio espectro de personajes que lo pueblan, continúa subiendo enteros por la forma en la que esgrime argumentos tan sólidos como el que podemos encontrar en un colorido espectacular(…)

Unos argumentos que se mantienen incólumes en este segundo volumen y que, arropados por la incorporación a esa estela de secundarios de la que hablaba antes de un nuevo villano tan tonto como adorable, configuran una lectura maravillosa para cualquier edad que se atreva a soñar. Un valor éste que no atesoran muchas cabeceras, al menos no con la intensidad que lo hace esta, y que convierte a ‘Pepino. Héroe de leyenda’ en lectura obligada para grandes y pequeños de la casa. Huelga decir que este es uno de esos libros que habrían sido inmejorable presente en las pasadas Navidades…o en cualquier momento que encarte. ¡¡Que hay que regalar libros y si son como ‘Pepino’, mucho mejor!!