‘Miles Morales Spiderman: Spidermen’, tan esperable como genial

Desde mucho antes de que Brian Michael Bendis decidiera acabar con la vida del Peter Parker «ultimatizado» y, por supuesto, desde muchísimo antes de que su testigo fuera recogido por Miles Morales, no creo equivocarme si afirmo que por la imaginación de muchos de los fieles seguidores de ‘Ultimate Spiderman’ rondaba la pregunta de qué daría de sí un encuentro entre los dos universos arácnidos. Una pregunta que quedó sin respuesta durante largo tiempo y que encontró materialización en los cinco números que conforman ‘Spidermen‘, un «crossover» en el más literal sentido de la palabra en el que el Peter Parker del universo tradicional Marvel cruzaba al universo Ultimate en virtud a una máquina construida por Misterio.

Guionizada con su pulso habitual por un Bendis que dejaba sitio a un buen puñado de sentidas emociones —entre ellas, huelga decir que el (re)encuentro de Peter con la tía May es de esos que te agarra con fuerza el corazón y le da un pellizco considerable—, ‘Spidermen’ es, sobre todo, un ejercicio de autocomplacencia, con un guionista dándose el gustazo de jugar a su antojo con ambos universos y unos lectores que— y hablo por mí, claro está— aceptando el juego, se lo pasan bomba, no tanto con lo imparable de la acción, sino con lo impagable de los diálogos que cruzan Peter y Miles y que, en parte, pudimos ver después trasladados a esa obra maestra del séptimo arte que es ‘Spiderman: un nuevo universo’. El trabajo de Sara Pichelli ayuda sobremanera a que la lectura adquiera tintes aún más sobresalientes, y algo quedará de rescoldo de este cruce en las cabezas pensantes de La Casa de las Ideas cuando, cinco años más tarde, impulsen un ‘Spidermen 2’ destinado a dar respuesta a la última viñeta del mini evento y del que, por supuesto, ya hablaremos llegado el momento.

Trascendido ‘Spidermen’, el segundo volumen con el que Panini está recogiendo ‘Miles Morales Spiderman‘ se completa con seis números de la serie regular, aquellos en los que la cabecera se encontraba metida de lleno en la Segunda Guerra Civil del universo Ultimate. El evento, que aquí vemos de manera parcial, tocaría todas las colecciones de dicho rincón de Marvel, planteando ciertas ideas bastante curiosas como convertir al Capitán América en presidente de los Estados Unidos. Con un Bendis en piloto automático —siempre he pensado que si el guionista estuvo tanto tiempo a bordo de ‘Ultimate Spiderman’ fue por las escasas injerencias que iba a tener a la hora de hacer lo que le placiera con la colección—, lo realmente reseñable de estos números es lo que plantean unos enormes David Marquez y Pepe Larraz, ambos como peces en el agua a la hora de plantear la desbordante acción que mueve este segundo tramo de un volumen que, ante todo, es puro Bendis. ‘Nuff said!!!!