‘Marvel Deluxe Vengadores Oscuros vol.3: Asedio’, el fin de la oscuridad

Pues se acabó lo que se daba. Con este ‘Marvel Deluxe Vengadores Oscuros: Asedio’ llega a su fin un de las colecciones más entretenidas y siniestras que se parieron durante el reinado de “terror” de Brian Michael Bendis. Para todo aquel que no lo sepa, el actual guionista mutante fue el encargado de “partir el bacalao” durante bastante tiempo en Marvel. Cada evento, cada decisión que se tomaba en La Casa de las Ideas, pasaba por las manos de un tipo tan idolatrado como odiado. Entre sus muchos (muchísimos) aciertos estuvo la creación de estos Vengadores malvados, una alineación que por momentos vivió aventuras más interesantes que las de la formación titular, algo que, tal y como estaban las cosas, es decir mucho.

La última tanda de números de la colección aporta un buen puñado de respuestas a muchos de los interrogantes que Bendis había ido planteando desde la primera entrega: ¿Cuál ha sido el destino de Noh-Varr? ¿Cómo consiguió El Vigía sus poderes? Y ya puestos, ¿qué o quién es el Vigía? Sin embargo, dejando a un lado estas preguntas, lo realmente importante de este volumen es la parte dedicada a narrarnos el destino de Los Vengadores Oscuros tras los acontecimientos narrados durante la saga Asedio.

Se han escrito ríos de tinta criticando la labor hecha por Bendis mientras estuvo en su periodo más productivo, se le acusa de haber destrozado la narrativa clásica y haber inventado el mal con la descompresión narrativa, lo que quiere contar debe caber en un recopilatorio de 6 números, aunque para ello tenga que sacrificar la calidad de la historia. Sea como fuere, las situaciones y los diálogos escritos por el de Cleveland son tan grandiosos, hace que los personajes interactúen en un entrono dominado por la acción desmedida y una “imperativa”.

Mención especial merece uno de sus fieles “espadas”, un Mike Deodato que ha ido evolucionando número a número, dejando atrás sus evidentes influencias noventeras hasta convertirse en un artista de lo más espectacular y versátil. Una pena que el curioso experimento no durara más ya que la colección estaba llamada a convertirse en una serie de culto, aún así, las dieciséis entregas de las que consta son un legado suficientemente bueno como para revisitarlo de vez en cuando, sobre todo, como la práctica totalidad de los comics de Bendis, leídos del tirón.
[Grade — 8.50]