Si hay algo que parece caracterizar tanto a la trama principal que Darko Macan utiliza para animar este segundo volumen de ‘Marshal Bass’ como a lo que atañe en concreto a su protagonista, eso es la voluntad de su guionista de comenzar a apartarse cuanto más mejor de ese referente inmediato que pendía sobre la primera entrega de esta serie que nos trae en gran formato ECC: alargada sobre cualquier western que se publique a este lado del Atlántico —lamentablemente, al otro lado del océano parece que el género ya no interesa—la sombra de Blueberry empieza a hacerse más tenue en unas páginas que, más que las que nos encontrábamos a comienzos de año, perfilan con trazos más definidos la personalidad de River Bass, el negro agente de la ley que tanto se aleja de cualquier estereotipo asociado a las historias del lejano oeste.
Regalándole mayor protagonismo que el que le veíamos otorgarle en ‘Black & White’, Macan rodea a su actor principal de un corpúsculo de secundarios desagradables y violentos que, en cierto modo, acercan los postulados de la historia a una suerte de mezcla del género con el de terror, aunque el guionista se cuida mucho de que, de éste último, lo que aparecen son breves pinceladas orientadas a crear cierto ambiente y a servir de telón de fondo al verdadero interés de la narración: más que contar una historia —que la cuenta, cuidado— construir un locus en el que situar a personajes interesantes que ir diseccionando poco a poco en contraposición a todos los demás.
Con Bass como catalizador e interés último de este proceso, es no obstante de nuevo el arte de Igor Kordey el que consigue reservarse las mejores alabanzas de ‘Asesinatos familiares’: el croata ha llegado a un momento de su carrera en el que, preso de una actividad frenética —casi diría que no ha habido mes este año que no hayamos hablado de él…es más, sin ir más lejos, mañana mismo volverá a ser objeto de atención en estas mismas líneas— no baja el nivel de calidad por más que su nombre sea tan recurrente. Tamaño ritmo está permitiéndole ir puliendo su narrativa a pasos agigantados y dejando atrás, cada vez más, esos atisbos de falta de claridad a los que trabajos pasados suyos siempre acudían. En definitiva, un álbum bien escrito, mejor dibujado y que, bastante original, amplía interés de cara a lo que la cabecera nos pueda ofrecer en el futuro.
Marshal Bass 2. Asesinatos familiares
- Autores: Darko Macan e Igor Kordey
- Editorial: ECC
- Encuadernación: Cartoné
- Páginas: 56 páginas
- Precio: 12,30 euros en