Dedicando nuestro tiempo el pasado miércoles a acercaros a ‘Dr.Uriel’ y a la soberbia forma en la que Sento nos relataba parte de la vida de su suegro en una trilogía que calificábamos como magistral, hoy tenemos que prestarle especial atención a uno de los álbumes que, a finales del diciembre, dejé apuntados como aquellos que hubieran tenido muchas opciones de haber formado parte inexcusable de la selección de lo mejor de 2016. Y si os preguntáis las razones para que ‘Jamás tendré 20 años’ entrara en el mismo grupo en el que había cabida para el cuarto volumen de ‘Sky Doll’ o el tercero de ‘Warship Jolly Roger’ tenéis que saber que éstas se reducían a una que vale por muchísimas: Jaime Martín.
El veterano autor, cuyas dos últimas obras nos habían dejado completamente anonadados —ay del que no se haya leído ‘Todo el polvo del camino’ y la asombrosa ‘Las guerras silenciosas’—, vuelve aquí a incidir en recuperar la memoria de sus ancestros, centrando su atención de forma exclusiva en esos abuelos que ya aparecieran reflejados en ‘Las guerras silenciosas’ y que vieron sus vidas puestas patas arriba con el alzamiento nacionalista que desembocó en la Guerra Civil.
Habiendo dicho hace dos días todo lo que tenía que decir al respecto de lo positivo y necesario de que el cómic español siga teniendo como uno de sus argumentos recurrentes miradas hacia los años que transcurrieron entre 1936 y 1939, no volveré a defender la extrema validez del proyecto de Martín por más que, sumado a todo aquello que transcurre durante los meses de contienda, el artista añada un muy largo recorrido por los tiempos de la posguerra, aquellos en que sus abuelos tiraron de imaginación y montaron un negocio de la nada intentando garantizar un futuro para sus hijas. Algo menos interesante que lo que acaece en la primera mitad del álbum, y con un discurso que guarda menor coherencia interna que aquél en el que se nos narran las peripecias de su abuelo y abuela por separado durante la Guerra Civil, la segunda mitad de ‘Jamás tendré 20 años’ sirve, no obstante, a un doble propósito: primero, rendir sentido homenaje a la generación de los padres de sus padres y, segundo, acercar al lector a una historia que, por sesgada, no se antoja menos universal.
Y si bien en lo estrictamente argumental hay, como decía, cierto escalón entre una y otra mitad de ‘Jamás tendré 20 años’, en lo gráfico Martín sigue demostrando a golpe de página que como narrador tiene pocos iguales: la sencillez de su estilo y lo inconfundible de su trazo —uno que, no cabe duda, mucha influencia ha tenido en posteriores nombres del panorama tebeístico español— se dan la mano con una exhaustiva labor de documentación para regalar al lector unas planchas soberbias que aumentan sobremanera uno de los mejores valores que atesora el libro, el que logremos sentirnos —como ya pasara con ‘Dr.Uriel’— parte integrante de los desvelos, sufrimientos y alegrías de los abuelos maternos del autor y de sus hijas. Un logro este que, sin lugar a dudas, termina de situar a este enorme álbum entre los mejores que se publicaron en España durante 2016.
Jamás tendré 20 años
- Autores: Jaime Martín
- Editorial: Norma
- Encuadernación: Cartoné
- Páginas: 120 páginas
- Precio: 20,90 euros en