Considerando detenidamente su temática, me cuesta entender la decisión de ECC de publicar en castellano un título tan sumamente particular como este ‘Gone to Amerikay’. Y me cuesta, ante todo, porque, aunque intenta mantener una cierta semblanza de universalidad en su desarrollo, el relato escrito por Derek McCulloch y dibujado por Colleen Doran está orientado a un tipo de lector muy específico: americano de ascendencia irlandesa, con todo lo que ello implica.
Basado en ‘Thousands are sailing’, una canción del grupo de rock anglo-irlandés The Pogues, la historia de McCulloch hunde sus raíces en las fuertes componentes de arraigo que los descendientes de los irlandeses siguen teniendo para lo que consideran como su tierra natal, y todo el volumen está impregnado de la melancolía que forma parte inherente de aquellos que cruzaron el Atlántico en busca de una vida mejor en la tierra de las oportunidades.
Para reflejar este sentimiento, el guionista recurre a una narración que desarrolla en tres tiempos: el pasado de finales del S.XIX, el más reciente de 1960 y el presente; tres líneas ligadas entre sí por una canción y la obsesión de un millonario de Dublín (el protagonista de la línea temporal actual) por averiguar su origen.
Siendo esta última la más floja de las tres, por cuanto su inclusión en la trama sólo sirve para dar fundamento a lo que los dos tiempos pasados exponen, y quedándose en tierra de nadie la de 1960 (que intenta aglutinar en poco espacio demasiados frentes político-sociales de la convulsa década de la historia norteamericana) es en aquella que acaece en 1870 donde McCulloch da en el clavo y la que, a la postre, mejor refleja los sentimientos de esperanza y añoranza que arroparon a los millones de personas que dejaron el viejo mundo para escapar del hambre y la pobreza.
Foco de origen de lo que después irá pasando en las otras dos líneas, la historia de Ciara y Maire no deja de ser, no obstante, la típica de superación ante las dificultades que hemos visto en el cine incontables veces, viniendo una y otra vez a la memoria visual del lector la referencia ineludible de ‘Un horizonte muy lejano’ el filme de Ron Howard protagonizado por Tom Cruise y Nicole Kidman (de maravillosa música por parte del gran John Williams, dicho sea de paso).
Ilustrado por una Colleen Doran cuyo fuerte siempre han sido la caracterizaciones de personajes (no hay dos que parezcan iguales, un logro teniendo en cuenta el amplio reparto con que cuenta la historia), la narrativa de la dibujante sigue estando presa de una cierta hiperestaticidad que impide, en ciertas ocasiones, el correcto fluir de una lectura que, como decía, aludirá poco a aquellos españoles que se acerquen a sus páginas.
- Autores: Derek McCulloch y Colleen Doran
- Editorial: ECC
- Encuadernación: Rústica
- Páginas: 144
- Precio: 13,95 euros