‘Fear Agent vol.1’, en una galaxia muy cercana…

Las editoriales parece que están al quite para ver cuál es el autor que despunta en la actualidad. La razón es bien sencilla, si un guionista está al frente del evento de turno en Marvel, se empieza a rebuscar en su bibliografía para ver si se puede pescar algún trabajo interesante y que permanezca inédito. El caso más reciente es el que hoy toca reseñar: Fear Agent. Rick Remender es uno de esos escritores que a golpe de buenas historias ha conseguido llegar hasta Marvel y guionizar Axis, el crossover de turno llamado a cambiar los cimientos de todo lo que conocemos y…bla, bla, bla.

Remender lleva ya unos años en esto de los comics, desarrollando sus primeros trabajos en el terreno independiente. Títulos de diversa consideración que se mueven desde lo más prescindibles hasta los must have que nadie debería perderse. En este último grupo podríamos incluir Fear Agent, una aventura espacial protagonizada por un personaje que es fiel reflejo, dentro de lo que cabe, de Han Solo, el inolvidable rebelde de Star Wars.

Tras finalizar la lectura del primer volumen de la serie publicado por Norma, lo primero que nos llama la atención es lo bien que se lo debió pasar Remender escribiendo las aventuras de Heath Huston. Gamberra, tierna, alocada, emocionante, dramática y ¿romántica? Todo esto y más es Fear Agent, una space opera que no concede ni un minuto de respiro y que, incluso, tiene lugar para una atmósfera algo deprimente, jugando con los sentimientos del lector y descolocándolo a la primera de cambio.

Huston el último Fear Agent en píe, es un tipo que fácilmente podría ser catalogado como una persona despreciable a la que da gusto querer. En su misión de eliminar toda plaga alienígena de vida poco (o nula) inteligente se encontrará con una serie de personajes que harán mucho más interesante la lectura. Para dar un trasfondo más sorpresivo, Remender no deja de aportar datos acerca de su pasado, siendo cada nuevo dato una pieza más que añadir a un puzle intrincado, molesto y adictivo.

Al alocado viaje propuesto por el guionista se le suma un elenco de ilustradores de esos que quitan el hipo ya que, al igual que Remender, con el paso de los años han conseguido ganarse un lugar privilegiado en la industria de las viñetas. Desde Eric Nguyen o Kieron Dwyer pasando por pesos pesados como Tony Moore, Jerome Opeña o Francesco Francavilla. El resultado final es un comic que se disfruta de principio a fin, planeando siempre una sensación de “puede pasar cualquier cosa” lo que convierte la lectura en una montaña rusa de sentimientos que no dejará a nadie indiferente. Pura diversión y entretenimiento.
[Grade — 9.00]