Con el inminente estreno de su esperada adaptación cinematográfica marcado en el calendario como una de las citas ineludibles con el cine de lo que queda de año, era muy previsible que Panini no dejaría pasar la oportunidad de comenzar a publicar las miniseries de cinco números que Marvel lleva lanzando desde 2008 sobre ‘El juego de Ender’. Unas miniseries que hasta ahora alcanzan once títulos diferentes, en los que podemos encontrar tanto adaptaciones directas del material escrito por Orson Scott Card como nuevas incursiones en el universo de Ender orientadas a complementar lo imaginado por el literato estadounidense.
Clásico moderno de la ciencia-ficción (y el libro favorito de nuestro Miguel Michán) tengo que admitir que por un motivo o por otro, nunca me he acercado a ‘El juego de Ender’, así que vayan mis disculpas por adelantado para aquellos que sí lo hayan hecho y consideren que la adaptación efectuada por Christopher Yost y Pasqual Ferry no está a la altura de lo que el libro describe.
Sin base pues con la que compararla, considero que la historia ideada por Card, adaptada a las necesidades del noveno arte por Yost y traducida al arte secuencial por Ferry es de una calidad incuestionable: el relato de Andrew «Ender» Wiggin, un chaval de seis años que entra a formar parte de una escuela destinada a convertirlo en un fiero y cruel guerrero de cara a enfrentarlo con la raza de los insectores, funciona a la perfección en una miniserie que sólo se ocupa de la primera parte del libro (la segunda parte se cubrirá en ‘Escuela de mando’) y que nos muestra el durísimo entrenamiento al que son sometidos los niños arrancados de forma tan temprana de sus hogares.
Fiel reflejo del mundo adulto que los rodea, el microuniverso creado en la escuela es caldo de cultivo para cruentas enemistades y un grado de competitividad que haría orinarse encima a cualquier hombre hecho y derecho, un paralelismo que, a mi entender, se establece como una de las grandes virtudes de la historia y sobre el que Yost hace bastante hincapié.
En lo que al arte de Ferry respecta, volvemos a encontrarnos aquí con el mismo tipo de dibujo que el artista español lleva practicando desde que le diera tan espléndidos resultados con ‘Adam Strange: Planet Heist’ allá por 2004: con su personalísimo trazo y su diáfana narrativa, Ferry sigue dando lecciones a aquellos dibujantes mainstream que creen que un cómic no son más que una sucesión de viñetas intercaladas con «espectaculares» splash-pages, demostrando el barcelonés que la inclusión de las mismas (a fin de cuentas esto es un tebeo americano, y tiene que haberlas por narices) puede, y debe, estar plenamente justificada.
Huelga decir que, sin saber cómo termina la historia de Ender, la espera hasta el próximo mes de octubre (cuando Panini publicará el segundo volumen de la serie) va a ser muy larga…
El juego de Ender: Escuela de batalla
- Autores: Orson Scott Card, Christopher Yost y Pasqual Ferry
- Editorial: Panini
- Encuadernación: Cartoné
- Páginas: 128
- Precio: 15 euros