Aficionados a las intrigas históricas, amantes del romance de miriñaque y pelucón: este no es el cómic que buscáis. Aunque quizás aquellos que enfoquen la lectura de la historia por el lado conspiranoico no se sientan tan decepcionados porque todo lo que vamos a encontrar en el ya tercer volumen de esta serie es, para vergüenza de la humanidad, completamente real. Y la pátina del tiempo hace que esa vieja afirmación de que la comedia es tragedia más tiempo sea más verdadera que nunca. La prueba fehaciente de que la verdad supera y por mucho a la ficción.
Para aquellos que jamás se hayan acercado a un volumen de ‘Deshechos históricos‘ o bien no hayan leído ninguna de sus páginas en ‘El Jueves‘ (donde lleva publicándose más de una decada) este título disecciona con humor de todos los colores, del negro al marrón pasando por el verde, la historia sin preferencia concreta por periodo alguno. En forma de historietas de tres páginas, presentadas por un anfitrión distinto en cada ocasión, en la más bella traición de ‘Los cuentos de la cripta’ o ‘La dimensión desconocida’, este volumen analiza tanto hechos históricos concretos como el día D o la primera cruzada como temas más genéricos como el papel de la mujer en la antigüedad, los tipos de vampiro o la historia del chocolate, e incluso sucesos que saben aunar rigor histórico y escatologia como la historia del váter. E incluso en más de una ocasión opta por diseccionar campos culturales y religiosos como la mitología nórdica, los cátaros o el santoral católico, rebautizados en este caso como The catholic X-men, una auténtica declaración de intenciones de un autor que sabe fusionar con inteligencia el concienzudo trabajo de documentación con la irreverencia absoluta, sin renunciar a los chistes malos, los juegos de palabras y las imágenes no aptas para las almas sensibles, con su dosis de hemoglobina y otras secreciones humanas sobre las que uno no quiere leer cuando está comiendo en un mundo en el que no hay héroes ni villanos: sólo idiotas.
La obra de Don Julio sabe dar una nueva dimensión al concepto amenidad, dando una personal visión tanto de hechos que todos hemos estudiado en el colegio como de otros que nos sonarán más probablemente por películas y no necesariamente serias (ahí están los paranormales ‘La montaña de los nueve muertos’ o ‘El triángulo de las Bermudas’). Su autor pasa completamente de conceptos como los límites del humor para hacernos reír sacando a la palestra lo peor de la especie humana desde el homo erectus y ¿por qué no decirlo? de nosotros mismos, haciéndonos reír a mandíbula batiente con más de un drama que quizás no debiera resultar tan risible en un auténtico placer (muy) culpable, aunque se reserva la crítica sería y punzante para decisiones tan deleznables como el lanzamiento de las bombas atómicas.
Con su explícito y caricaturesco estilo que el artista abandona en contados capítulos como el dedicado a los instrumentos de tortura, en el que se permite un alarde de virtuosismo imitando las ilustraciones de las miniaturas medievales, Don Julio nos presenta una más que digna continuación de los dos volúmenes previos. Nuestra lectura puede empezar perfectamente por cualquiera de los tres, sin perder su chispa en ninguno de ellos, con unos gags acompañados de cuidadosa información que hacen que muchos nos enganchamos a este particular modo de contar la historia tal como han hecho, salvando mucho las distancias, los libros de autores como Carlos Fisas o Nieves Concostrina, o la colección ‘Esto no estaba en mi libro de‘ que dedica buena parte de su catálogo a los temas históricos.
Este por el momento tercer volumen de ‘Deshechos históricos’ demuestra que la fórmula no se agota. Después de todo, si el apocalipsis de turno no lo remedia, queda historia para rato.
Deshechos históricos 3
- Autores: Don Julio
- Editorial: Fandogamia
- Encuadernación: Rústica con solapas
- Páginas: 104 páginas
- Precio: 15 euros
- Julio, Don (Author)