Lo reconozco. Darren Aronofsky es uno de mis directores fetiche. Probablemente sea una de las pocas personas que no se durmió viendo ‘La fuente de la vida’ (The Fountain) y que incluso se la compró luego en Blu-ray para poder disfrutar de ella unas cuantas veces más. Así que, si no estáis entre los pocos pero fieles fans de Aronofsky, me vais a tener que perdonar por esta breve cápsula sobre ‘Black Swan’ (Cisne negro), su último y cautivador trabajo.
Escrita por Mark Heyman, Andres Heinz y John McLaughlin, ‘Black Swan’ es un thriller psicológico que gira en torno a Nina (Natalie Portman), una obsesiva bailarina de ballet que ansía ser la mejor y alcanzar la perfección por encima de todo. La cosa promete volverse interesante cuando entra en escena Lilly (Mila Kunis), una nueva bailarina con un gran potencial que llega a su misma escuela robándole protagonismo en su ansiada actuación del baile de los cisnes.
Parece que obsesión y locura (o tal vez no) irán cogidas de la mano es una película de la que, viendo el tráiler, cualquier aficionado a Satoshi Kon diría que estamos asistiendo al remake de ‘Perfect Blue’ con bailarinas en lugar de idols; algo que solo hace que tenga más ganas de ver un film con un reparto que completan Vincent Cassel, Barbara Hershey, Winona Ryder y Sebastian Stan.