Planeta acaba de estrenar una nueva serie dentro de su Biblioteca Pachinco. Se trata de Astral Project, una historia de suspense y fantasía creada por el dibujante Syuji Takeya y el guionista Marginal (seudónimo de Garon Tsuchiya, que también firmó Old Boy). La historia comienza cuando Masahiko, un joven que trabaja como chófer de prostitutas de lujo, se entera de que su hermana ha muerto en extrañas circunstancias.
Afligido, acude a su casa para guardar como recuerdo algunas de las cosas de su hermana y para, quizá, conseguir averiguar algo. Allí se encuentra con un CD que al parecer la joven había escuchado antes de morir. Cuando lo escucha en su casa, comprueba que se trata de un álbum de jazz en el que destaca un poderoso y sugerente saxofón. Pero no se trata de un disco normal y corriente.
Mientras lo escucha, Masahiko se separa de su cuerpo y es capaz de realizar viajes astrales entre este mundo y el más allá. Durante estos viajes, se encontrará con otros enigmáticos personajes que quizá puedan ayudarle a resolver el misterio de la muerte de su hermana.
Este primer tomo de Astral Project ha sido toda una sorpresa porque me ha enganchado de principio a fin y me ha dejado con ansias por leer el segundo tomo. Un enganche que no sentía desde Death Note o 20th Century Boys. Sin necesidad de llevar un ritmo vertiginoso en la sucesión de acontecimientos, la historia nos atrapa según avanzan las páginas, especialmente por el repertorio de personajes secundarios que van apareciendo y que arrojan nueva luz sobre el misterio.
Marginal despliega un puzzle que vamos reconstruyendo poco a poco, aderezado por su magistral uso de los silencios. También me ha gustado especialmente la faceta melómana de la historia. De hecho, vale la pena leerse este manga con el jazz de Robert Ayler de fondo. Precisamente es Goin’ Home (Imeem) la canción que hace volar a Masahiko y que aquí os dejo para que podáis disfrutarla.
El dibujo de Takeya puede parecernos un poco feo al principio, pero en cuanto nos hagamos a él podremos apreciar su habilidad para utilizar estilos diferentes en un mismo tomo. Yo destacaría principalmente su uso de los claroscuros y la expresividad que aporta al rostro de los personajes.
En definitiva, Astral Project es un manga adulto y original, bendecido con un guión sólido, lleno de intriga y pasión por la música. La obra durará cuatro tomos, y en cuanto a la edición de Planeta, el resultado sería impecable de no ser por el uso del papel reciclado ese tan cutre que acostumbran a utilizar. Aunque hubieran tenido que subir un poco el precio, un papel de calidad habría hecho justicia a este manga que está camino de convertirse en uno de mis favoritos del año, junto con el estupendo Ikigami.
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