‘The Boys Integral 1’, y si no, nos enfadamos

Los chicos de la editorial Norma parecen no querer dejar de alegrarnos la existencia con la publicación de gruesos integrales recopilando series de mayor o menor duración. Si ya pudimos disfrutar con los de ‘Sin City‘, ‘Hellboy‘ o ‘AIPD‘, ahora le toca el turno a una de sus series talismán, ‘The Boys‘, que a falta de un último tomo en rústica para dar su particular canto del cisne, inicia su andadura en el mundo del lujo y el cartoné con la primera de la que serán tres entregas.

El responsable encargado de poner algo de orden a esta chaladura de serie es el irlandés Garth Ennis, guionista de ese clásico moderno llamado ‘Predicador‘, por lo que el aficionado que tenga un ligero conocimiento de dicha obra se podrá hacer una idea de lo que se va a encontrar en las páginas de ‘The Boys’. Tanto es así, que en los Estados Unidos los primeros números fueron publicados por Wildstorm pero al ver el nivel de violencia y depravación que mostraban los protagonistas del tebeo, Ennis tuvo que buscar amparo en una nueva editorial, Dynamite.

La idea central del cómic puede resultar un tanto manida pero claro, si un guionista del talante de Ennis está involucrado, siempre se puede esperar alguna que otra vuelta de tuerca que deje al lector con la mandíbula desencajada. The Boys es un grupo de agentes especiales que trabajan para la CIA y su misión consiste en impedir que los superhéroes se descontrolen. Conviene advertir llegados a este momento la inquina que el guionista siempre ha mostrado hacia los tipos musculados y vestidos con llamativas mallas de colores, por lo que el estándar de heroicidad y moral dista un poco de lo que sería habitual en este tipo de tebeos.

El grupo formado por Hughie, Carnicero, Leche Materna, El Francés y La Hembra no conocerá límites a la hora de llevar a cabo su misión por lo que tras un rápido vistazo nos podríamos llevar la equivocada impresión de que ‘The Boys’ tan solo es una sucesión de gags en los que lo único que resalta es la cruda y extrema violencia, las escena de sexo casi explícitas o el consumo desinhibido de drogas por parte de personajes que tendrían que defender otra clase de valores. Bien es cierto que esto estará presente durante toda la colección pero ‘The Boys’ es mucho más, ya que este comportamiento de tan dudosa moral es tan sólo una de las herramientas que Ennis utiliza para convertir su obra en una gran sátira de un género que, como decía, nunca ha sido de su agrado.

Este primer integral recopila los cuatro arcos argumentales que abrieron la colección, publicados por Norma hace ya algunos meses: Las reglas del juego, Moja, Bueno para el alma y Nos damos el piro. De esta manera vamos a poder asistir a las primeras aventuras con un recién llegado Hughie que poco a poco empieza a asimilar su nueva condición de defensor, veremos cómo son las relaciones internas del grupo y los lazos que se establecen entre unos y otros serán muy recurrentes a lo largo de los 72 números en que se desarrolla la historia.

Y por supuesto conoceremos al enemigo de tan peculiar grupo, El Patriota, líder de Los Siete, el grupo más importante y conocido del mundo donde tienen lugar las aventuras de ‘The Boys, personaje arrogante’, encantado de conocerse a sí mismo y que maneja a su antojo y en su propio beneficio la formación de héroes bajo su cargo.

Si hubiera que ponerle un pero a la colección ese sería el apartado artístico del mismo ya que tras un Darick Robertson en estado de gracia, que aguantó al frente de la serie una buena temporada, el testigo pasó a una serie de sustitutos que, sin ser malos dibujantes, le restaban puntos a la hora de considerar la obra como un trabajo redondo. De momento toca disfrutar de esta primera entrega que nos trae Norma y que es una estupenda excusa para acercarse por primera vez o para disfrutar una vez más de uno de los cómics más salvajes y polémicos que se han publicado recientemente. Palabra de predicador… digooo, de redactor.