‘Superman Volumen 1: El Hijo de Superman’, ¡arriba, arriba y más arriba!

Renacimiento. Una palabra que ha puesto de nuevo a la editorial DC Comics en la cresta de la ola. Un nuevo y brillante estado editorial que refulge con más fuerza, si cabe, al entrar en comparación directa con las anteriores Nuevas 52, un experimento que tuvo buenos momentos pero que no fue del gusto de crítica y afición. Sea como fuere, esta nueva etapa está cargada de notable series, colecciones que, casi todas ellas, funcionan a la perfección y resulta muy difícil encontrar alguna que no esté a la altura. El acierto en DC ha sido tratar a sus personajes como si fueran de primera división todos ellos, incluso la cabecera más simple y que, a priori, pudiera mostrar poco interés, terminaba siendo una lectura más que recomendable. Aún así, los pesos pesados de la editorial cuentan con autores de más renombre o, al menos, tuvieron un papel fundamental (positivo) en las mencionadas Nuevas 52.

Tal es el caso del Hombre de Acero, abanderado de DC junto a Batman y Wonder Woman, y del que ya podemos disfrutar del primer volumen recopilatorio, este ‘Superman Volumen 1: El Hijo de Superman’, un arranque lleno de buenos momentos y más que prometedor. Un relato consecuencia directa de lo narrado en la imprescindible “Lois y Clark: La Llegada”, una miniserie que plantaba las semillas para este nuevo estatus quo del personaje, empezando una nueva vida en familia en un universo que no es el suyo, con una Lois más combativa que nunca y un hijo, Jon, en plena efervescencia de sus poderes. Es ahí donde radica el interés principal de la serie, poder ver a Clark priorizando sus labores como padre, estableciendo un nivel de empatía con sus progenitores (Jonathan y Martha) que no se había visto es todos los años de historia del personaje. Sí, el truco parece radicar en humanizar al superhombre de tal manera que todos los problemas por los que tiene que pasar, los hagamos nuestros y suframos a la misma vez que él.

El altísimo nivel que se alcanza no es de extrañar al ver los autores que llevan las riendas de la colección, dos viejos conocidos que con cada nueva colaboración dejan patente la buena compenetración existente entre ambos. Por un lado, el guionista Peter J. Tomasi del que desde esta página no nos cansamos de recomendar cualquier obra en la que aparezca su nombre. Ha demostrado por activa y por pasiva su buen hacer con los personajes de DC que toca y, con Superman, no iba a ser menos, planteando una serie tramas con un potencial mayúsculo. Su inseparable Patrick Gleason (también acreditado como coguionista) sigue creciendo número a número, tan espectacular como efectivo, sus personajes, de dinamismo interminable y expresividad facial muy característica, son una muestra del mucho cariño que le pone a su trabajo. Tendrá como “suplentes” a Jorge Jiménez, actual ilustrador de La Liga de la Justicia, que a la chita callando se ha posicionado como uno de los dibujantes más en forma de la industria, y a Doug Mahnke, otro clásico dentro de DC y cuyo estilo se adapta a cualquier historia que le pongan por delante. Una inmejorable carta de presentación que deja con ganas de más. Y vaya si lo habrá.
[Grade — 9.00]