Podría parecer que se está convirtiendo en una costumbre demasiado recurrente pero os aseguro que no es así. De hecho, en más de una ocasión he decidido redactar de nuevo, tras la lectura de turno, una reseña completamente distinta a la que ya tenía por ahí publicada. Pero es que, en lo que a ‘Superman: Identidad secreta‘ respecta, nada ha cambiado más allá de mi admiración creciente por la que, pocas dudas pueden quedar a la luz del titular, es una de las mejores historias jamás publicadas por DC con el último hijo de Krypton como protagonista. Y como nada ha cambiado salvo el seguir leyéndola y encontrar constantes motivos para celebrarla por todo lo alto, os dejamos aquí con las impresiones que mi yo de hace un lustro plasmó sobre ella.
Es tener que escribir sobre Superman y terminar, sí o sí, afirmando que «es un personaje que casi nunca ha funcionado en sus diversas series regulares», que «su todopoderosa definición nunca lo ha hecho atractivo a mis gustos lectores» y, por último, que «donde podemos encontrar las mejores historias del Hombre de Acero es, sin lugar a dudas, en los Otros Mundos y series limitadas con el superhéroe de protagonista».
Llegado el momento de la última aseveración es cuando saco a colación el limitado puñado de títulos que considero lectura obligatoria sobre el personaje creado por Jerry Siegel y Joe Shuster, un pequeño corpúsculo compuesto por el ‘Hijo Rojo’ de Millar, Johnson y Plunkett, el ‘For all Seasons’ de Loeb y Sale, el ‘Orígen’ de Johns y Frank y, en una primera posición compartida con ‘It’s a Bird!’ de Seagle y Kristiansen y el ‘All-Star Superman’ de Morrison y Quitely, este ‘Identidad secreta’ con el que Kurt Busiek y Stuart Immonen sorprendían a propios y extraños hace casi una década.
Enmarcada dentro de aquella línea llamada Otros Mundos, el equivalente decero de los ‘What if?’ marvelitas, que tantísimo exploró la editorial de Batman en tiempos pasados antes de que las Nuevas 52 convirtieran a todo lo que hubo antes en una realidad alternativa, ‘Identidad secreta’ servía a Busiek para dar salida a una premisa de partida tremendamente original que encontraría en su desarrollo una voz única —la que siempre le hemos visto al guionista en ‘Astro City’— con la que posicionarse como una de las tres mejores historias de Superman que hayan visto la luz.
La idea es muy simple: un chaval llamado Clark Kent que vive en un pequeño pueblo de Kansas y que tiene que soportar las constantes bromas pesadas de sus compañeros de instituto descubre un buen día que tiene poderes similares al personaje de ficción. Tras este arranque, al que Busiek dota de un ritmo espléndido, resolviéndolo en poco más de diez páginas, ‘Identidad secreta’ explora el impacto real de un humano con poderes en un mundo que no siempre estará dispuesto a aceptarlo, siendo quizás lo mejor de cuánto se saca el escritor de la chistera esa constante y ominosa presencia de una ogranización gubernamental secreta que perseguirá al protagonista a lo largo de toda su vida, resolviendo el relato de forma magistral el choque de poderes entre ambos extremos del espectro.
Y si el guión de Busiek está a un nivel que rara vez se ha visto en las páginas del último hijo de Krypton, el arte de Immonen se escapa por momentos a cualquier burdo esfuerzo que uno pretenda hilvanar mediante el uso de los epítetos habituales: con un estilo que nada tiene que ver con el que actualmente le estamos viendo en las grandiosas páginas de ‘All New X-Men’, el dibujo del artista estadounidense —que aquí y allá imita a la perfección a los de aquellos nombres que fueron alguna vez puntales en la historia del personaje— dota de singular verismo a la historia, descansando gran parte del peso de la efectividad de la misma en una narrativa dinámica y un trazo vigoroso y de arrebatadora personalidad.
Lectura de esas que no importa las veces que se haga, siempre aporta algo nuevo, ‘Superman: Identidad secreta’ funciona además a las mil maravillas con aquellos lectores no habituales de cómic que conozcan los fundamentos básicos de la mitología del personaje —vamos, los que ilustraban Richard Donner y Christopher Reeve en el ‘Superman’ de 1978—, apasionándoles en similares medidas a lo que un veterano en las lides del noveno arte puede extraer de tan ejemplar obra.
Superman: Identidad secreta
- Autores: Kurt Busiek y Stuart Immonen
- Editorial: ECC
- Encuadernación: Cartoné
- Páginas: 208 páginas
- Precio: 22,50 euros