El profesor Randolph Stein es un aventurero que ha liderado multitud de expediciones con un claro objetivo: demostrar que los mitos y leyendas que pueblan el imaginario popular son falsos. Su misión más reciente, con la que da comienzo este cómic, le ha permitido probar que el Yeti no es más que un producto de la imaginación. Y su próxima misión no se queda atrás, ya que recibe el encargo de investigar si existe realmente la ciudad submarina de Atlantis.
Nos encontramos en 1950, y pocos meses antes de los hechos narrados en ‘Namor: En las profundidades’, el capitán Marlowe desapareció junto con su tripulación durante una expedición en busca de la citada y mítica ciudad. Así pues, Stein será el encargado de tomarle el relevo, y lo hará con un escepticismo que no comparten en absoluto las demás personas que lo acompañan en su viaje a las profundidades. Durante el trayecto, los tripulantes empiezan a hablar de Namor, el misterioso protector de Atlantis que mata a todo aquel que se atreva a internarse en sus dominios. Stein los amonesta continuamente por creer en esas paparruchas, pero con el paso de los días, las certezas que tenía antes de emprender el viaje empezarán a desvanecerse.
En esta obra, Namor se convierte en una suerte de Batman que es capaz de avivar el terror de los hombres con apenas citar su nombre. A lo largo de las páginas, su presencia se hace cada vez más palpable, al tiempo que la locura y el agobio producidos por el encierro a cientos de metros bajo la superficie, van haciendo mella en Stein. Y la cosa no mejora cuando descubre el terrible destino que aguardó a los tripulantes de la base submarina de la fosa de las Marianas. Un pasaje que nos deja las escenas más intensas del cómic.
Cualquiera que haya leído cómics de Marvel alguna vez, sabe perfectamente que Namor no sólo existe, sino que más vale no jugar demasiado con él. Así pues, la búsqueda de Stein lo va conduciendo a una respuesta que todos conocemos de antemano. Por eso, ‘Namor: En las profundidades’ no es un cómic que destaque por su intriga o por los giros del guión de Peter Milligan. Su magia radica en la atmósfera que crea. Al leerlo, nos ponemos en la piel de Stein y sus compañeros, y olemos el miedo que los asfixia en los oscuros pasillos del submarino.
Para configurar esta atmósfera, ha sido decisivo el trabajo del dibujante croata Esad Ribic, que hace gala de un estilo muy realista, similar en muchos puntos al de Alex Ross, aunque menos estático. Ribic consigue dar a sus personajes una expresividad increíble, a veces próxima a la caricatura, que expresa a la perfección las sensaciones extremas que experimentan durante el viaje. Pero si por algo destaca en este cómic, es por su forma de jugar con las luces y sombras, por su uso de los claroscuros, de forma que consigue ponernos los pelos de punta en más de una viñeta.
En resumen, este cómic cuenta con un guión entretenido y un dibujo excepcional que hacen de él una lectura muy recomendable. Si además os pasa como a mí, y Namor os ha parecido siempre un personaje bastante soso, creo que después de esta obra podréis empezar a mirarlo con otros ojos.
Ficha Técnica
* Título: Namor: En las profundidades
* Contiene: Sub-Mariner: The Depths 1-5 USA (noviembre de 2008 a mayo de 2009)
* Editorial: Panini
* Editorial USA: Marvel
* Formato: Cartoné // 120 págs. // Color
* Precio: 14 euros
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