‘Marvel Saga Daredevil Volumen 23: Tierra de Sombras’, demasiada oscuridad

Poco a poco, y con paso decisivo, vamos teniendo cada vez más cerca el final de Daredevil en la línea Marvel Saga, un canto del cisne que se producirá en breve con el cierre de la etapa firmada por Andy Diggle. El guionista británico no lo tuvo nada fácil puesto que sustituir a un inconmensurable Ed Brubaker no es algo que se pueda hacer así como así, y para terminar de añadir emoción al asunto, hasta la sombra de Brian Michael Bendis aún estaba presente por entonces. Menudo papelón. Sin embargo, Diggle, no se echó atrás y agarró el toro por los cuernos, poniendo toda la carne en el asador y apostando fuerte por medio de un cambio radical en el estatus personal del defensor de La Cocina del Infierno. Este ‘Marvel Saga Daredevil Volumen 23: Tierra de Sombras’ recupera el crossover más oscuro que se recuerda en la colección, un evento de marcado carácter callejero que, sobre el papel, debería haber funcionado algo mejor de lo que resultó.

Continuando los acontecimientos narrados en la anterior entrega, nos vamos a encontrar a un Matt Murdock líder de la organización La Mano, algo que cogió por sorpresa a todos los aficionados y que nos abría un amplio abanico de posibilidades. Sí, Daredevil abrazaba de manera definitiva su lado más oscuro y, por mucho que nos cueste entender, estamos ante un villano en toda regla. Para ello construirá una fortaleza que servirá como centro de operaciones de la secta y, desde ahí, intentará eliminar todo signo de delincuencia de La Cocina haciéndose con el control de sus calles. Evidentemente, esto no se logra con buenas palabras y sin el uso de la violencia. Diggle se esfuerza en justificar esta nueva posición de Matt haciéndonos ver que la locura se ha apoderado de él y no es consciente de sus actos.

De manera bastante inteligente, es aquí cuando centra la acción en una serie de personajes secundarios, todos ellos amigos del abogado (Dakota Noth, Foggy, Danny Rand, Luke Cage), a los que les cuenta creer la actual situación de su colega. Ya saben, ¿será capaz de cruzar la línea?, algo que no es nuevo y ya habíamos podido ver en anteriores etapas como la de Frank Miller o la del mencionado Bendis. Con todas las piezas desplegadas sobre el tablero, la historia tiene el suficiente atractivo como para que funcione, pero hay algo que no termina de cuajar. Quizás ese Daredevil frio, calculador y villano no termina de cuajar ni de ser todo lo creíble que debería ser, demasiada oscuridad gratuita y giros en la historia que no causaban el efecto deseado. Aún así, nos quedan unas páginas maravillosamente dibujadas por Billy Tan y Roberto de la Torre, con un uso de las sombras más acentuado que otros trabajos suyos. Uno se encargará de la saga central y el otro de los números correspondientes a la serie regular, todos ellos perfectamente intercalados y ordenados para que la cronología del relato no se vea alterada por una mala ubicación de las páginas (se dará cuenta de esto a medida que vayan leyendo). Una lectura entretenida que podría haber dado bastante más y que es gracias a todos los personajes utilizados en el relato que el interés no decae estrepitosamente. Imagínense el contraste de toda esta “Tierra de Sombras” ante la inminente llegada del “colorido” Mark Waid, un cambio de dirección que daría como resultado una de las mejores etapas que ha vivido el personaje.

[Grade — 7.00]