‘Marvel Gold Vengadores Costa Oeste: El Ataque del Zodiaco’, simple y efectivo

Nueva entrega de uno de los comics más entretenidos que se pueden leer ahora mismo, y eso que es odiado por una parte bastante grande de los aficionados al tebeo superheroico, pero desde aquí apoyamos la recuperación que Panini está realizando de la filial occidental de Los Héroes Más Grandes de la Tierra. ‘Marvel Gold Los Vengadores Costa Oeste: El Ataque del Zodiaco’ se convierte, por derecho y con todo merecimiento, en un imprescindible para todos los seguidores del grupo ya que, por fin, parece que la formación terminará por consolidarse con la incorporación del Caballero Luna. Pero no será lo único que nos vamos a encontrar en el volumen.

El guionista Steven Englehart parece haber encontrado la dirección que le quiere imprimir a las aventuras de Ojo de Halcón y los suyos. Junto a Tigra, Pájaro Burlón, Iron Man y el Hombre Maravilla empezará a mover las piezas para hacer que las tramas se vuelvan cada vez más interesantes. La pasmosa facilidad con la que va cerrando los cabos sueltos y va abriendo nuevos frentes resulta uno de los mayores alicientes tanto de esta entrega como de la colección en general. La decisión de poner al frente de la cabecera a un hombre de la casa, tan experimentado como Englehart fue todo un acierto.

Mucho girará en torno al Zodiaco androide, un elemento que será de vital importancia para que se vayan resolviendo algunas incógnitas planteadas desde el comienzo de la serie. Pero no será lo único ya que también podremos deleitarnos con la presencia de algunos personajes clásicos como son Mortaja o Yetricar, sin olvidarnos de otros, más relacionados con el grupo, como son Arkon o El Jinete Fantasma, clamando venganza y cuya presencia traerá más de un quebradero de cabeza a nuestros simpáticos héroes. Si a todo esto añadimos alguna que otra suplantación de miembros de la formación, la cosa no puede pintar mejor para que el entretenimiento campe a sus anchas.

Los guiones de Englehart nos transportan a otra época en la que los comics no estaban tan interrelacionados, donde se podía seguir las aventuras de un grupo como este sin tener que estar pendientes de chorrocientos eventos y otras tantas colecciones. Aquí lo que prima es la relación que existe entre los distintos miembros de la formación y lo bien caracterizados que están cada uno de ellos. También ayuda bastante las ilustraciones de Al Milgrom, dibujante que ha hecho de todo en la industria y que siempre ha sido criticado pero que, a un servidor, le encanta su trazo sencillo y agradable. Suma y sigue, en la última página del presente tomo nos encontramos con que habrá continuación, no sabemos cuándo pero esperemos que sea pronto.
[Grade — 8.00]