Lo decía hace unas semanas en la entrada correspondiente a lo mejor que el cómic europeo nos dejó durante el año pasado: dado el altísimo nivel al que suelen moverse sus obras, me resultaba imposible resaltar una de ellas sobre las demás por mucho que tanto ésta que nos ocupa hoy como los dos volúmenes que componen ‘La Mondaine’ pudieran alcanzar una «mejor» calificación en lo que al apartado visual se refiere. Y es que, cada vez que vuelve a tocar hablar de Zidrou (y el 2014 ha sido un año muy prolijo en tales menesteres) es muy probable que cualquier acercamiento previo medianamente objetivo —enfásis en el medianamente— se vaya al garete por cuanto la impresionante trayectoria del guionista francés afincado en nuestro país es impecable de principio a fin.
Último proyecto que nos llegaba en el tramo final de los pasados doce meses, ‘Marina 1. Los hijos del Dux’ no se queda atrás en lo que a sobresalientes apreciaciones se refiere. De hecho, el que Zidrou se «atreva» por primera vez con un cómic de corte semi-histórico (la trama da saltos desde la Venecia del presente a la del siglo XIV) sólo sirve para añadir aún más superlativas connotaciones a las que ya arrastraría de por sí una historia plena en intrigas y giros inesperados que, además, sorprende por que también se trata de la primera vez que el escritor deja parcialmente de lado el sesgo que hasta ahora mejor había caracterizado a su tebeografía. Si sois de los que me habéis hecho caso y os habéis acercado a alguno de los títulos del autor (y si no me habéis hecho caso, peor para vosotros XD ) encontraréis que este volumen no mira tanto hacia tocar la fibra sensible del lector y sí a que el relato que se construya lo haga a partes iguales entre el rigor histórico y la adecuación a las fórmulas del suspense.
A que ambos factores consigan su objetivo viene a ayudar el trazo de Matteo, un dibujante del que poco (por no decir nada) había visto hasta ahora y que le sienta como un guante a la historia de los dos hermanos hijos del Dogo de Venecia que sufrirán mil penurias a manos de unos cruentos piratas: de narrativa fluida y espléndido tratamiento del color gracias a unas aguadas controladas de forma soberbia, el dibujo del artista, que juega muy bien tanto en la concreción de sus personajes como en el detalle de los escenarios sobre los que se desarrolla la acción, es ese factor añadido que siempre se encuentran en los proyectos amparados por Zidrou. Y eso es otra virtud que no se le puede negar al guionista, el saber rodearse de artistas con personalidad que engalanan su palabras con unas planchas dignas de elogio.
Marina 1. Los hijos del Dux
- Autores: Zidrou & Matteo/li>
- Editorial: Norma
- Encuadernación: Cartoné
- Páginas: 56 páginas
- Precio: 15 euros
Pues yo sí que seguí tu consejo y me acerqué a Zidrou, y la verdad es que me ha sorprendido muy gratamente. Marina, junto con Leo, Lea y El cliente es lo único que me falta por leerme de su obra publicada en castellano. ¿De cuántos álbumes se compone Marina? Saludos.
De Marina han salido en Francia hasta el momento dos álbumes (el segundo fue editado el pasado mes de junio). Más allá de eso no te sé decir.
Y me alegra saber que he provocado que alguien haya descubierto a Zidrou y las dos que te faltan por leer son espléndidas por más que su dibujo, en el caso de ‘Leo, Lea’ no sea nada del otro jueves.