Panini ha movido ficha, otra vez, y se ha apresurado en presentar un par de nuevos formatos para intentar hacer frente a la situación en que nos hemos visto sumidos. Volúmenes de esos que conocemos como “de batalla”, precios asequibles para la mayoría de bolsillos y un número de páginas lo suficientemente importante como para que el comprador se vaya satisfecho a casa. El primero de ellos, “Marvel Premiere” parece estar dedicado a etapas recientes y exitosas de algunas de las series emblemas de La Casa de las Ideas como “Daredevil”, “Doctor Extraño”, “Hulk” o, próximamente, “X-Men”. No lo olvidemos, lo último de lo último. Por otra parte nos vamos a encontrar con “Marvel Must-Have”, tomos en tapa dura que rescatarán relatos autocontenidos en su mayoría y cuyo peso específico dentro de la historia Marvel está fuera de duda para todo buen aficionado. Historias como “Civil War”, “La Muerte de Lobezno”, “La Saga de Fénix Oscura”, “Planeta Hulk” o “El Hombre sin Miedo” son solo algunos de los ejemplos que vamos a tener.
No es de extrañar por tanto la aparición de este ‘Los Cuatro Fantásticos: El Lobo a las Puertas’, el arranque de aquella etapa enmarcada en el sello “Marvel Knights” donde veían la luz proyectos con un perfil algo más realista. ¿No se lo creen? Pues presten atención a la premisa de estos primeros números. La Primera Familia Marvel ha sido engañada, estafados por su propio contable, un tipo que ha hecho lo mismo con más héroes de la ciudad de Nueva York. Tal magnitud ha tenido el hecho que ha dejado a nuestros queridos personajes en números rojos, forzando a Reed y los suyos a abandonar la que hasta entonces era su casa, el Edificio Baxter. Parece que toca buscar un empleo, como todo el mundo, e intentar llevar un sueldo a casa. Nadie se lo esperaba, ¿cierto? Ante esta nueva situación, el rol que desempeña cada uno de los personajes está aún más marcado que de costumbre: Míster Fantástico tendrá que tirar de humildad para aceptar un trabajo algo menos cualificado, Sue tratará a todos como a sus hijos y ese carácter maternal será predominante en todo momento, Johnny representa la explosiva juventud y Ben intentará encontrar su sitio en un mundo laboral que no se lo pondrá fácil.
El guionista Roberto Aguirre-Sacasa es el encargado de mostrarnos el lado más humano de uno de los grupos superheroicos por excelencia. La cuota de viñeta de cada uno de los miembros del cuarteto Marvel está perfectamente repartido, haciéndolos interactuar con ciudadanos de a pie, gente de Nueva York que los hará sentir como, eso, personas normales y corrientes, con sus luchas diarias particulares alejadas de cualquier enfrentamiento de dimensiones intergalácticas. Supone también el material contenido en este tomo, el trabajo que puso en lo más alto al dibujante Steve McNiven, un dibujante cuya cotización subió como la espuma pero que poco a poco se fue desinflando, quedando hoy en día para citas muy puntuales o proyectos especiales en los que pueda dedicar todo el tiempo que necesite. Una pena ya que su estilo detallista, de poses imposibles y rostros hiperrealistas debería tener mayor continuidad pero, al igual que otros genios de los lápices (se me viene a la cabeza Travis Charest), parecen peleados con las fechas de entrega. Aún así, el volumen proporciona una visión bastante general de lo que nos ofrecía la nueva cabecera y supone una oportunidad bastante buena para ver a unos personajes moverse en un contexto completamente novedoso.
[Grade — 8.00]
Marvel Must-Have Los 4 Fantásticos: El Lobo a las Puertas
- Autores: Roberto Aguirre-Sacasa y Steve McNiven
- Editorial: Panini
- Encuadernación: Cartoné
- Páginas: 176 páginas
- Precio: 15.00 euros