La afabilidad de su trazo y la sencillez de una historia que se antoja cercana deberían haber sido armas más que suficientes para que Hartley Lin hubiera conquistado a este redactor a las pocas páginas de ‘La joven Frances’. Pero lo cierto es, que lo que el artista estadounidense plantea en este relato sobre un momento puntual de la vida de una asistente jurídica, no se lo pone fácil al lector —al menos a este lector— y en lugar de cautivar desde su comienzo, lo hace como una carrera de fondo no exenta de obstáculos.
Quizás el más evidente de ellos sean los compases iniciales, 30 o 40 páginas en las que Lin se dedica a meternos de cabeza, in media res, en el complejo discurso existencial de la protagonista, no aportando toda la información necesaria para que podamos aprehendernos de cuáles son los derroteros por los que se mueve todo el asunto. A dicha complejidad hemos de añadir la de los satélites que Lin va disponiendo alrededor de Frances, toda una cohorte de secundarios que hacen aún más compleja la precisa comprensión de las varias direcciones sobre las que discurre la lectura.
Pero, oh sorpresa, trascendidas ese considerable puñado de páginas de arranque, la apreciación hacia ‘La joven Frances’ cambia por completo: lo que era un coro de voces heterogéneo que fallaba en cantar a compás, se convierte en una coral que entona al unísono con una historia que sabe como resonar en la misma longitud de onda que aquella en la que se mueve el que esto suscribe. Y, claro está, si hasta entonces era complicado percibir el esfuerzo del artista, no ya por dotar de carisma y voz propia a su protagonista, sino por hacer lo mismo con esa masa de secundarios a la que antes me refería, desde ese momento, todo gira a mejor y los secundarios, que en ocasiones —caso de la amiga de Frances o de ese enigmático jefe— superan en interés a la chica que da título al volumen, entablan una danza que, en perfecta y alterna armonía con ella, nos llevan de la mano a una conclusión de una naturalidad pasmosa que cierra de manera afable un volumen de esos que, incuestionablemente, ganará muchísimo en sucesivas aproximaciones.
La joven Frances
- Autores: Hartley Lin
- Editorial: Astiberri
- Encuadernación: Cartoné
- Páginas: 144 páginas
- Precio: 17,10 euros en