Capítulo intermedio dentro de la trilogía que terminará conformando la próxima entrega de ‘La cólera de Fantomas’, este ‘Todo el oro de París’ no hace sino refrendar las espléndidas sensaciones que ya nos dejara la primera parte de esta historia que recupera para el cómic a uno de los personajes literarios —y cinematográficos, aunque como ya vimos hace unos meses, las versiones que el cine ha hecho de él estén completamente alejadas de la esencia del personaje— más conocidos al otro lado de los Pirineos y aumentarlas en extremo para dejarnos un sabor de boca inmejorable de cara a la conclusión que esperemos Dib-buks no se demore mucho en publicar dada su aparición en enero de este mismo año en el país vecino.
Lo que las páginas de ‘Todo el oro de París’ ofrecen sigue abundando en todo aquello que apuntábamos allá por abril, esto es, un guión con el que Olivier Bocquet intima y comulga de forma precisa con la idiosincrasia derivada de los relatos imaginados a principios del s.XX por Marcel Allain y Pierre Souvestre —caracterizando así el desarrollo de la acción con una fuerte personalidad macabra y truculenta—; y una labor por parte de Julie Rocheleau que, a todas luces, no podría ser calificada menos que ESPECTACULAR. De hecho, si las sensaciones que imprime en el lector este segundo volumen superan con mucho a las que nos dejaba su predecesor es por acción directa de lo que podemos encontrar en unas planchas asombrosas que vuelven a ser un auténtico delirio de expresividad en grado sumo y un dechado de alucinantes virtudes cromáticas. Sólo por contemplar las viñetas con las que Rocheleau va salpicando ‘La cólera de Fantomas’, ya valdría la pena por completo acercarse a un álbum que, sumado a ellas, ofrece mucho más. ¿A qué estáis esperando?
La cólera de Fantomas 2- Todo el oro de París
- Autores: Olivier Bocquet & Julie Rocheleau
- Editorial: Dib-buks
- Encuadernación: Cartoné
- Páginas: 64 páginas
- Precio: 15,20 euros en
Tiene narices que lo más parecido a fantomas que he leído haya sido Phantomas, el alter ego super heroico del pato Donald (salía en los don Mickey). Y al final resulta que era una parodia…