‘El Día Más Brillante Volumen 2’, el misterio se resuelve

Desde hace algunos meses podemos disfrutar del final de uno de los eventos que nacieron en las páginas de Green Lantern, y se alejaba bastante de la sombría historia que Geoff Johns estaba contando usando a los portadores del anillo verde. En ‘El Día Más Brillante Volumen 2’ la historia sigue hacia delante, con el grupo de resucitados en la primera entrega intentando llevar a cabo la misión impuesta por el anillo blanco, portado convenientemente por Deadman. La recompensa será la posibilidad de recuperar sus vidas, algo por lo que merece la pena luchas y arriesgar al máximo.

Hay un misterio desde el principio del relato que, en este segundo volumen, sigue siendo el motor principal. ¿Quién o qué es el mencionado anillo blanco? Está claro que el objeto tiene un plan y que sabe manejar a héroes y villanos para que estos hagan lo que se propone, pero, ¿qué relación tiene con el salvador que tantas veces se anuncia? Geoff Johns y Peter Tomasi han sabido crear una historia llena de suspense, contada con muy buen tino ya que la narración salta de un personaje a otro, provocando una sensación de necesidad por conocer más información de lo que está pasando.

Y todo esto tiene mucho más mérito si tenemos en cuenta que los personajes elegidos para esta resurrección en masa, son de segunda fila, tanto que algún que otro lector que no esté muy “metido” en el Universo DC podría no reconocer a algunos de ellos. Otro dato a tener en cuenta es el tiempo que no hemos visto sus caras en ningún tebeo publicado por la editorial, hay que recordar que todos ellos estaban fallecidos, lo que provoca cierto “olvido” editorial por parte de todo el mundo.

Misterio, intriga y mucha acción en un evento que cuenta con dos nombres propios bastante importantes en el guión pero que la parte gráfica está también más que cubierta gracias a un elenco de dibujantes de gran calidad. Artistas consagrados como Ivan Reis o Patrick Gleason combinan sus esfuerzos con otras estrellas menos fulgurantes como Ardian Syaf o Scott Clark para crear un tebeo maravilloso, una lectura tan agradecida como interesante que llegó en un momento en el que todo lo que hacía estaba bien hecho. Que tiempos aquellos.
[Grade — 8.00]