Hay un defecto de forma que nunca me ha convencido de las series de aparición semanal —o quincenal, que para el caso es casi lo mismo—: el que la propia idiosincrasia del producto oblitere cualquier concepto de fechas de entrega normales y, por ende, proyectos como ’52’, ‘Batman Eterno’ o el ‘Batman y Robin Eternos’ que hoy nos ocupa, queden finalmente en manos de una miriada de dibujantes que impiden, obviamente, que el producto se perciba como un todo cohesivo. Poco importan aquí las valoraciones positivas que puedan hacerse de cada uno de ellos por separado cuando, al agarrar el integral publicado por ECC y hojear rápidamente sus páginas, lo que nos encontramos son variaciones de estilo tan radicales como las que hay desde la forma de entender el cómic de Tony Daniel hasta aquellas que detentan nombres como Paul Pelletier o nuestro Álvaro Martínez.
Completamente diferentes las unas de las otras —y sólo he citado a tres de la casi veintena de artistas acreditados— uno no puede evitar pensar qué habría sucedido si, planteada con más antelación y ejecutada con algo más de esmero y consideración por parte de DC, ‘Batman y Robin Eternos’ hubieran estado firmadas por una única mano. Pero eso, hoy por hoy, es pedir peras al olmo cuando estamos ya hartos de contemplar como el baile de dibujantes es la moneda de cambio habitual en cualquier cabecera de las dos grandes majors —de ahí que, aunque venga poco al caso, me gusten tanto las propuestas de Image, que se ciñen siempre a un único equipo creativo y, de tener que interrumpir su ritmo de publicación, se interrumpe en aras de preservar esa homogeneidad inexistente en DC o Marvel.
Anhelos al margen, la cohesión que falta en unas páginas que se hacen grandes en las interveciones de Álvaro Martínez, correctas en las de Pelletier o Daniel y sólo pasables en el resto de artistas, queda reflejada, si bien en muy menor medida, en el dispar equipo que conforman los ¡siete guionistas! encargados de llevar a buen puerto esta exploración de las sinergias entre Batman y los diferentes Robin a la que, en cierta medida, tanto debió en su momento el arranque de ‘Detective Comics’ tras el Rebirth: presentando a una villana llamada Madre a la que se le atribuyen conexiones con Bruce que se remontan al pasado lejano del multimillonario, y ahondando de manera muy insistente en el talante coral de la narración, ‘Batman y Robin Eternos’ echa mano de manera intensiva de dos de los miembros de la familia, Cassandra Cain, aka Huérfana, y Stephanie Brown, aka Spoiler, nuevas incorporaciones al reparto cuyas respectivas idiosincrasias quedarán fuertemente asentadas en estas casi 600 páginas.
El resultado del tira y afloja entre el objetivo primario del guión y sus varios objetivos secundarios es una lectura tremendamente dinámica y amena que, trascendida en muchos aspectos por el deceso de las Nuevas 52 y el cambio de status quo en la totalidad del Universo DC, no pierde gran parte de su interés por esos otros flecos de su personalidad que aún guardan vigencia y la elevan como un evento de obligada aproximación para todos aquellos amantes del microcosmos que rodea al hombre murciélago.
Batman y Robin Eternos
- Autores: VVAA
- Editorial: ECC
- Encuadernación: Cartoné
- Páginas: 592 páginas
- Precio: 45,12 euros en