‘Astro City: Cambios’, llegando al final del camino

Echando la vista atrás, cuando el primer número de Astro City vio la luz (creo recordar que se trataba de una miniserie que contaría con seis entregas), todo el mundo estaba pendiente de su lectura ya que la publicitaban (por aquel entonces eso de internet no estaba todavía al alcance de todos y muchos tirábamos de revistas especializadas y correos de los lectores) como algo bastante novedoso y poco visto en el terreno superheroico. Y no andaban muy desencaminados, desde las maravillosas portadas pintadas por Alex Ross como los guiones de Kurt Busiek no podían resultar más atractivos para el aficionado curioso y deseoso de algo nuevo. Una rápida consulta a la red de redes lanzará datos que nos abrirá los ojos ante la cantidad de material que se ha publicado de este título, da un poco igual que sea en forma de miniseries, especiales o serie abierta, el centenar casi se ha alcanzado.

Todo esto para informar que este ‘Astro City: Cambios’ que ECC Ediciones puso en circulación hace poco será el penúltimo de la colección, al menos, tal y como la conocemos hasta el momento. Se llegará al número 52 y pondrá punto y final a esta nueva etapa bajo el sello Vertigo. Para tranquilidad de todos los seguidores, las aventuras de Samaritano y compañía tendrán continuidad en forma de novelas gráficas, un nuevo formato que parece ser la mejor solución para que todos los autores implicados puedan dar lo mejor de ellos. Tal y como lo hacen en este nuevo volumen donde encontraremos cuatro nuevos relatos protagonizados por Míster Manta, villano “retirado” en una isla desierta en la que se encuentra mucho mejor y bastante más tranquilo que en la gran ciudad, o Caballero, uno de los héroes más reconocidos e importantes de Astro City y del que conoceremos datos sobre su origen pero vistos desde la perspectiva de su adorable hija.

Estas nuevas aventuras siguen la tónica y el tono habitual de lo que hemos venido leyendo hasta ahora, historias de marcado carácter humano y que, de alguna manera o de otra, nos llega directamente al corazón. Esta vez no nos importa si el peso de la acción recae sobre un intrépido héroe o un malvado villano, Busiek consigue que le cojamos cariño rápidamente sin importarnos cuáles son sus intenciones. Muestra del cansancio y desgaste que los autores han ido sufriendo con el paso de los años, para este volumen encontramos hasta un par de dibujantes “suplentes” que le tendrán que echar una mano a Brent Anderson (que con 63 años, ahí sigue el hombre dándolo todo, al menos lo que puede). Eso sí, los recambios elegidos son lo suficientemente interesantes y de calidad como para no echar de menos (demasiado) a Anderson: Rick Leonardi y Matthew Clark. Y, por supuesto, no podemos olvidarnos de las portadas de Alex Ross, que no ha faltado a su cita desde la primera entrega, otorgándole a la colección un elemento fácilmente reconocible y marca de la casa. Esperaremos esa última entrega que llegará en breve y confiemos en que la serie no tarde en volver puesto que se ha convertido en una lectura imprescindible para cualquiera que pretenda disfrutar de una de las mejores series que ha dado el medio en los últimos años.
[Grade — 9.00]