Allá por 2001 andaba yo dando clases de informática a mayores en un centro social de Málaga, en las puertas de un famoso barrio de los que se nutre Callejeros. A tiro de piedra había (hay) un cine que aquel 19 de Diciembre ya estaba dando *la primera sesión de ‘La Comunidad del Anillo’*, una película que llevábamos años siguiendo y deseando. La segunda sesión empezaba poco después de acabar la clase, y teníamos las entradas reservadas.
Llevaba apenas unos meses con mi chica (ahora esposa). Ella acababa de leer la trilogía después de mucha insistencia por mi parte, le encantó. Así que ninguno iba de nuevas, aunque claro, ella no había jugado a MERP, ni a Rolemaster, ni había llevado al instituto una carpeta forrada con ilustraciones de *Akhôrahil por un lado y de Khamûl el Oriental por otro*.