Artemis Fowl es un chico de doce años con un intelecto brillante que ha decidido ponerlo al servicio de actividades delictivas. Pero no penséis que lo hace sólo por ambición o por delirios de grandeza (aunque tampoco le faltan), sino porque está decidido a recuperar la fortuna y el honor familiares, perdidos tras la misteriosa desaparición de su padre, que también dedicó su vida a diversos y turbios menesteres.
Los primeros planes de Artemis lo cruzarán en el camino de una civilización de criaturas mágicas que viven en el subsuelo de nuestro mundo, concretamente con tres personajes que serán fundamentales en sus aventuras: la capitana Holly Canija, una elfa adscrita al cuerpo policial de esta civilización subterránea; el comandante Julius Remo, jefe de la anterior y aficionado a fumar puros sin parar; y Mantillo Mandíbulas, un enano capaz de colarse en cualquier sitio, célebre por sus audaces robos y también por sus incontenibles flatulencias.
Y una vez que los pasos de estos personajes empiezan a cruzarse, el resultado es diversión en estado puro, aventuras sin descanso y mucho sentido del humor. Es por ello que la lectura se hace muy ágil, entretenida y agradable; y los puntuales giros que pega el guión nos darán a los lectores más de una sorpresa.