Hace unos pocos años, en uno de esos viajes a la tienda para ver qué estaba llegando a las librerías, hubo un tomo que me llamó mucho la atención, más por tamaño que por otra cosa. Se trataba de ‘Blankets‘, una novela gráfica inmensa realizada por Craig Thompson. Lamentáblemente en esa época no tenía yo un gran poder adquisitivo como para adquirir, valga la redundancia, ese mamotreto, así que lo dejé correr hasta que lo vi en la biblioteca… y lo devoré. Me encantó, entendía perfectamente las alabanzas y marqué el nombre del autor para tenerle en cuenta. Hace unas semanas cayó en mis manos su última novela gráfica, ‘Habibi‘, publicada por Astiberri a finales de septiembre y que tenía toda la pinta de superar a ‘Blankets’, y creo que en cierto sentido lo ha hecho.
‘Habibi’ nos sumerge profundamente en el mundo islámico. Nos cuenta la historia de Dodola, una joven niña que es dada muy de pequeña en matrimonio y que por circunstancias de la vida acaba siendo capturada como esclava. Entonces Dodola adoptará de pequeña a Zam, un bebé desamparado (hijo de otra esclava) y, escapando de su cautiverio, le criará en pleno desierto, enseñándole multitud de historias. Así pues ‘Habibi’ nos contará la historia de la vida tanto de Dodola como de Zam, juntos y por separado desde las cloacas hasta el harem del Sultán de Wanatolia, pasando por la dura supervivencia en el desierto.