Qué difícil es asustar al público hoy en día. Ya nos las sabemos todas. Ni siquiera el cine y los videojuegos, con la cantidad de recursos que tienen a su disposición —visuales, sonoros, narrativos—, son capaces ya de producirnos ningún escalofrío, salvo en honrosas excepciones. El cómic lo tiene aún más complicado, al menos en lo que se refiere a meternos el miedo en el cuerpo. En cualquier época podemos encontrar tebeos de terror fabulosos, algunos de los cuales se han convertido en clásicos del 9º arte, con independencia de su género. Pero aunque muchos destacan por su atmósfera, por sus giros argumentales o por alguna que otra secuencia puntual, son muy pocos los que de verdad llegan a impresionarte, a provocarte ese sudor frío en la nuca propio de las grandes obras de terror. Y son los autores japos, al menos en mi caso, los que más se han acercado a conseguirlo. No recuerdo otro cómic más inquietante que ‘Uzumaki’, de Junji Ito, autor del que próximamente llegará un batallón de novedades a nuestro país, de la mano de ECC. Y más que por su desarrollo argumental, que tampoco es para tirar cohetes, lo es por sus grotesco y espeluznante grafismo. Basta una búsqueda rápida de imágenes en Google para saber de qué hablo. En esa misma línea, los mangas de terror de Suehiro Maruo —como ‘La sonrisa del vampiro’ y ‘La oruga’— también son una fuente inagotable de mal rollo. Otros mangas como ‘El niño gusano’, ‘Hideout’ y ‘Gyo’ tampoco se quedan cortos. Pero los años no pasan en balde y la fórmula se va agotando, así que es necesario que cada cierto tiempo aparezca un autor con ideas frescas para darle un nueva vuelta de tuerca al género.
Masaaki Nakayama es uno de esos autores que ha tratado de provocar escalofríos al lector con una fórmula novedosa. Así lo comprobamos en el primer volumen de ‘Semillas de ansiedad’, un recopilatorio de historias cortas —escenas sueltas, en realidad— despojadas de cualquier carga narrativa para centrarse fundamentalmente en los golpes de efecto. Son historias que rara vez superan las cuatro o cinco páginas de extensión, sin relación entre sí, más allá de alguna coincidencia temática. De hecho, los relatos que componen este volumen se organizan en cinco categorías: “La escuela”, “Te sigo…”, “Visitantes”, “Sombras al borde del camino” y “Cosas enigmáticas”. La propuesta es original y efectista, aunque muy arriesgada, ya que no hay espacio material para profundizar en los personajes ni en la situación. Es como si cogieras una película de terror y suprimieras todas las secuencias, salvo aquellas en las que se produce algún susto. El resultado puede ser impactante en un primer momento, pero a largo plazo se convierte en un amasijo reiterativo e insulso.
Para que la propuesta de Nakayama pudiera funcionar sería necesario que cada escena, pese a su brevedad, resultara tan original y escalofriante que pudiéramos prescindir tranquilamente del resto de la historia. Pero no es así. Por lo general, las historias que encontramos en ‘Semillas de ansiedad’ se limitan a presentarnos a un personaje que, en algún momento de su vida cotidiana, se topa con alguna presencia fantasmagórica. Por lo general, se trata de seres de apariencia semihumana, con expresiones grotescas e intenciones aviesas, de esos que tanto les gustan a los japoneses. Algunas son muy imaginativas, como “¿Llueve?”, y otras te dan cierto mal rollito porque imaginas que podría llegar a ocurrirte a ti, como en “Una mirada a hurtadillas”. Pero en general, leer este volumen supone saltar de una escena inconexa a otra sin que ninguna logre llamarte demasiado la atención. El nivel sube ligeramente en el último apartado, el de las “Cosas enigmáticas”. Pese a mantener el mismo formato de las anteriores, resultan mucho más sugerentes y originales. Salvo “Paseo”, que es bastante tonta, las demás pertenecen a ese selecto y reducido grupo de historias a las que ni les sobra ni les falta nada. Si el segundo volumen sigue la estela de estas últimas aportaciones, estaremos ante un trabajo interesante. Pero por el momento, la única sensación que produce este primer tomo de ‘Semillas de ansiedad’ es decepción.
Semillas de ansiedad núm. 01 (de 03)
- Autor: Masaaki Nakayama
- Editorial: ECC Ediciones
- Encuadernación: Rústica con sobrecubiertas
- Páginas: 136
- Precio: 8,95 euros