Pese a que en el shonen no falten los poderes sobrenaturales, los héroes virtuosos ni los enfrentamientos continuos entre el bien y el mal, todos ellos ingredientes fundamentales de cualquier cómic de superhéroes, hasta la fecha no habíamos encontrado ningún manga que pudiera encuadrarse con exactitud dentro de ese género tan asentado entre los lectores occidentales. Los autores nipones siempre se han desmarcado bastante de las influencias externas. De hecho, el efecto suele ser a la inversa, es decir, que son los autores occidentales los que se dejan seducir por la estética, el ritmo y el estilo de los japoneses. En esta ocasión, sin embargo, las tornas vuelven a cambiar y en ‘My Hero Academia’ nos encontramos con un manga fuertemente influenciado por los cómics de superhéroes americanos. Algo que quizá sea una de las razones por las que esta obra, que se lleva serializando desde 2014 en las páginas de la revista ‘Shonen Jump’, ha tenido una acogida tan formidable en su país natal, hasta el punto de generar ventas millonarias y de contar con una reciente y exitosa adaptación al anime.
‘My Hero Academia’ se ambienta en un mundo en el que la mayoría de la gente posee algún tipo de súperpoder. Eso no significa que todos resulten especialmente útiles, ni que toda la población se enfunde en unas mallas de colores y salga por ahí a combatir el mal o a provocarlo. En realidad, los villanos y los superhéroes suponen una pequeña parte de la población, y estos últimos se forman en la escuela Yûei, donde algunos héroes legendarios les enseñan a dominar sus poderes. El más famoso de estos peculiares profesores es un musculoso defensor de la justicia llamado All Might, y su mayor fan sobre la faz de la tierra es un adolescente llamado Izuku Midoriya, que sueña con convertirse algún día en un superhéroe tan poderoso como su ídolo. El problema es que Izuku no parece haber desarrollado ningún poder, razón por la cual sus compañeros de clase se meten con él y le hacen la vida imposible. Pero Izuku está decidido a intentarlo y, gracias a la colaboración de All Might, conseguirá ingresar en la escuela Yûei, donde vivirá toda clase de aventuras en compañía del resto de alumnos y profesores. El resulto de esta premisa es un híbrido bastante curioso donde los elementos típicos de los shonen de peleas ambientados en una escuela se aderezan con la épica propia de los tebeos de superhéroes. Esa mezcla de estilos también se percibe en el acabado gráfico, sobre todo en personajes como All Might, que están diseñados con un trazo y unos sombreados que recuerdan al estilo de los dibujantes yanquis.
Sin que podamos considerarla exactamente como una obra coral, por las páginas de ‘My Hero Academia’ desfilan multitud de personajes, lo cual puede abrumarnos un poco hasta que nos vamos metiendo en la historia. De momento muchos de ellos tienen un papel meramente anecdótico, pero hay otros que, junto a Izuku y All Might, parece que serán relevantes conforme avance la trama. Entre ellos destacan Tsuyu Asui —una joven estudiante que tiene los poderes de una rana—, Shôta Aizawa —un profesor bastante peculiar, más conocido por su alias Eraser Head, que es capaz de arrebatarles los poderes a los demás—, Tenya Iida —otro alumno, cuyo sentido del deber y la responsabilidad genera, curiosamente, momentos bastante hilarantes— y el repelente Katsuki Bakugô —el principal rival de Izuku, un joven irascible e impulsivo capaz de generar explosiones muy potentes. Todos ellos y muchos más se dan cita en este manga que discurre por la senda habitual del shonen, a caballo entre la acción y el humor con un ritmo bastante desbocado, si bien la historia tarda un poco en arrancar. En ese sentido, es de agradecer que Planeta haya decidido publicar los dos primeros tomos en un único cofre y a un precio reducido, ya que el primer volumen apenas te deja con la miel en los labios.
Sin embargo, y aunque considero que parte de una idea que tiene mucho potencial, de momento no considero que esta serie sea para tanto. Es posible que para los japoneses resulte una propuesta bastante novedosa, pero para los lectores que estamos acostumbrados al pijameo de toda la vida esta obra no aporta gran cosa. Por otro lado, y aunque estéticamente estén muy bien diseñados, los personajes todavía tienen que desarrollarse, y creo que ahí radica la clave de que ‘My Hero Academia’ acabe alcanzando el nivel que cabría esperar de una serie con tanto éxito. Habrá que tener paciencia, como suele ser habitual en los mangas que, como este, tienen una duración considerable. Eso sí, mucho tienen que cambiar las cosas para que este ejemplo de superhéroes a la japonesa se convierta en algo más que en un simple pasatiempo entre lecturas con más enjundia.
My Hero Academia Vols. 1 y 2
- Autor: Kohei Horikoshi
- Editorial: Planeta Comic
- Encuadernación: Rústica con sobrecubiertas
- Páginas: 192 (cada tomo)
- Precio: 8,95 euros (pack edición limitada)