Joe Hisaishi es uno de los mejores compositores de banda sonora de la actualidad. Hace un tiempo publiqué en nuestro blog hermano Blogdecine un post múltiple sobre los 7 mejores compositores de BSO vivos. No incluí a Hisaishi por una razón muy sencilla: para entonces apenas conocía su obra. Había visto ‘El Viaje de Chihiro‘, y sus partituras me parecieron excelentes. Pero limitarme a eso y que apareciera en la lista me parecía muy arriesgado. A día de hoy, he visto prácticamente todas las películas a las que este, digámoslo ya, genio ha puesto música.
Hisaishi destaca ante todo por tener un estilo muy reconocible y personal. Su versatilidad además, produce la extraña sensación de percibir cómo se adapta a determinados estados de ánimo o ritmos, pero sin perder su esencia. Le gusta que el piano sea el protagonista de sus temas, y se aproxima en ocasiones al minimalismo, con la reiteración de una melodía principal que se adorna progresivamente, bien con un piano acompañante, con un cuarteto de cuerda o con ruidos circunstanciales. A pesar de que su estilo oriental es muy marcado, Hisaishi ha sido tomar determinados rasgos occidentales que enriquecen sus bandas sonoras, dando lugar a una extraña mezcla que se presenta como muy original y con un aura universal irrepetible. Bien sea Pachelbel o Michael Nyman, lo cierto es que este compositor, nacido en 1950 en Nagano, trasciende sus influencias y es uno de los pocos compositores que no se parecen a ningún otro. Aun con la sencillez de sus melodías, es muy difícil notar que alguna vez se repite, y con cada banda sonora construye un universo particular que a menudo se complementa perfectamente con la atmósfera de la película a la que acompaña.
Demos un repaso por sus temas más destacados:
‘Summer – El Verano de Kikujiro’
Tema imprescindible en la obra del autor. Esta melodía alegre se repite en la película de Takeshi Kitano unas seis o siete veces y no llega a cansar nunca. Hisaishi sabe extraer el carácter rudo y vitalista del personaje que interpreta el propio director y combinarlo con la inocencia del niño. Vemos el gusto por el staccato, casi jazzístico, y el discreto tono oriental que le caracteriza.
‘View of Silence’
Deja sin aliento el cuidado diálogo entre el cuarteto de cuerda y el piano, que mantienen un duelo sin llegar a chocar. Esta pieza no es de ninguna banda sonora, pero es fundamental para entender el estilo de Hisaishi.
‘La Princesa Mononoke’
Impresionante la riqueza de temas que conforman el «main theme» de esta aclamada película de 1997. Hisaishi se convirtió en el compositor fetiche del gran Hayao Mizayaki, y con razón.
De todas formas, mi tema favorito es ‘Painters‘, de la banda sonora de la película ‘Hana-bi‘ (‘Flores de Fuego’), también de Takeshi Kitano. Buscadlo, ponedlo en vuestro MP3 y escuchadlo alguna vez que paseeis por la calle. La experiencia será deslumbrante.
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