El guionista Jason Aaron, que tan buen sabor de boca nos está dejando con su serie ‘Scalped’, se estrenó en la serie regular de Punisher con el arco argumental que acaba de recopilar Panini en un tomo. Para dar sus primeros pasos en la colección, Aaron decidió alejarse de la continuidad para revisitar algunos personajes míticos del entorno de Frank Castle. Y el primero de ellos es nada menos que Kingpin.
La historia arranca con una reunión de las principales familias mafiosas de Nueva York. ¿Y cuál es el punto del día? Pues como era de esperar, Punisher. Y es que el bueno de Castle tiene acojonados a todos los maleantes de la Gran Manzana, eso si no los ha mandado ya a unas vacaciones permanentes en el otro barrio. Cansados de esta situación, los cabecillas del crimen organizado deciden pasar a la acción sirviéndose de una figura mítica cuyo nombre siempre ha sonado en las calles y bajos fondos de la ciudad: Kingpin.
De este modo asistiremos al ascenso de Wilson Fisk, conoceremos algunos detalles sobre su infancia (impresionante una de las escenas que protagoniza con su padre, de lo mejor de este cómic), su familia, sus aspiraciones… Vamos, que nos metemos de lleno en su lustrosa cabeza mientras que Punisher se mantiene en un discreto segundo plano, si bien protagoniza algunos enfrentamientos de alto voltaje (como el que mantiene con un menonita).
Muchos autores han explorado ya la figura de Wilson Fisk y la visión que nos muestra ahora Jason Aaron tampoco es que sea excesivamente rompedora, pero convence y da pie a reflexionar sobre su personalidad. Lo importante, en cualquier caso, es que el guionista de Alabama ha firmado un cómic entretenido, gamberro e intenso que abre buenas expectativas sobre su futuro en la serie del Castigador.
Sus puntos fuertes siguen siendo la falta de tapujos a la hora de mostrar escenas duras e impactantes, su ágil sentido de la narratividad y, por supuesto, sus diálogos, que siguen sin ser aptos para lectores sensibles. Por otra parte, la elección de Steve Dillon (‘Predicador’) como dibujante me ha parecido excelente, y ambos autores se complementan muy bien para contar esta clase de historias de corte negro.
En resumidas cuentas, ‘Punisher: Kingpin’ es un tomo entretenido y recomendable, si bien sus autores aún tienen mucho camino por delante para explotar todo su potencial. Lo mejor de todo es que demuestran estar a la altura del legado que ha dejado Garth Ennis con el personaje tras su paso por la colección, y todo apunta a que el bueno de Frank Castle todavía tiene cuerda (y balas) para rato.
* Autor: Aaron y Dillon
* Editorial: Panini
* Formato: Rústica con solapas
* Número de páginas: 120
* Precio: 11 euros
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