¿Hay algo más frustrante que seguir una serie y que no cumpla su periodicidad? Si ya se me llevan los demonios cada vez que aguanto los parones de Perdidos (ahora hasta finales de abril sin mi droga televisiva), no os quiero ni contar lo que me ocurre con ciertos comics o, mejor dicho, con varios de sus guionistas y aún más de sus dibujantes.
Hay una norma no escrita que dice que cuando te conviertes en estrella del comic, la primera diferencia es que tardas más en hacer tus trabajos. Y, claro, Astonishing X-Men, una serie creada para que dos super-mega-estrellonas del medio se luzcan, lo está pagando y muy caro.
A medida que John Cassaday y Josh Whedon se han ido acercando al final de su saga, los retrasos han sido cada vez mayores, algo que ha sufrido hasta la edición española de Panini. Pero, ahora, para el último episodio, la cosa se ha desmadrado.
En teoría, ya deberíamos estar leyendo como acaba la saga de Breakworld y qué ocurre con Coloso. De hecho, este mes deberíamos estar leyéndola en castellano. Pero, ¡tachan!, las estrellitas han vuelto a decir que hay que retrasar la salida del comic, que no llegan a tiempo, que hasta el próximo 21 de mayo nada de nada. O sea que en nuestro idioma no la leeremos hasta ¡agosto! Y eso como mínimo.
Sinceramente, estoy harto de esos parones. ¿Tanto tiempo se necesita para pensar y dibujar 24 ó 48 páginas? ¿O no será que Whedon y Cassaday están metidos en demasiados proyectos a la vez? ¿Acaparan proyectos por ambición económica o artística? En fin, quien con estrellas se acuesta…
Vía | Zona Negativa