Que la suerte esté siempre de vuestra parte
Cuando hace un par de años empecé a oir hablar sobre ‘Los Juegos del Hambre’, la verdad es que no me llamó demasiado la atención. A pesar de que tenía amigos que me recomendaban leer el libro y me contaban que habría una adaptación este año, no me animaba a echarle un ojo. Meses después, con la aparición de los tráilers y el material gráfico la película me empezó a llamar la atención, sobre todo porque tenía la etiqueta “próximo gran blockbuster” colgada.
El pasado viernes se estrenó en cines españoles ‘Los Juegos del Hambre’ (‘The Hunger Games’), la primera parte de la nueva saga de moda. La película está escrita y dirigida por Gary Ross (‘Pleasantville’) con Billy Ray (‘La sombra del poder’) ayudando en un guión basado en el libro homónimo, primera entrega de la trilogía realizada por Suzanne Collins.
Nos encontramos en un futuro distópico, en una nación llamada Panem, en lo que hoy conocemos como Norteamerica. Hace años hubo una cruenta sublevación por parte de unos distritos periféricos subyugados por la capital de la nación; tras resolverse el conflicto se dictó el Acta de Traición, que estipula que como castigo a esta sublevación, cada distrito de los doce sublevados deberá entregar en tributo a un chico y una chica de entre 12 a 18 años para que participen en los llamados Juegos del Hambre, una batalla campal televisada donde sólo uno puede salir con vida.
Katniss Everdeen (Jennifer Lawrence), una chica de dieciseis años, se presenta voluntaria por el distrito doce al ver que la elegida por sorteo (la cosecha) ha sido su hermana. Así pues Katniss partirá hacia la capital junto con el otro tributo de su distrito, Peeta (Josh Hutcherson); allí recibirán instrucción y preparación en todos los sentidos por parte de Effie (Elizabeth Banks), Cinna (Lenny Kravitz) y Haymithch (Woody Harrelson), un sobreviviente del juego. Un juego que es todo un fenómeno social televisivo presentado por Caesar Flickerman (Stanley Tucci) y dirigido por Seneca Crean (Wes Bentley) bajo mandato del presidente Coriolanus (Donald Sutherland).
La película es Jennifer Lawrence. Ella la sostiene y le dota de la fuerza necesaria para que el espectador menos habituado al “blockbuster” de corte adolescente. Sin embargo si no empatizas con la protagonista ‘Los Juegos del Hambre’ se puede hacer bastante cuesta arriba. Personalmente llegó un momento en la cinta en el que Jennifer Lawrence empezó a ser bastante cargante, ya que no tiene demasiado carisma (el suficiente). De hecho un problema de ‘Los Juegos del Hambre’ es que tienen más carisma los no jugadores que los tributos, a mí me interesó más lo que pasa fuera que lo de dentro, al decir verdad.
‘Los Juegos del Hambre’, la distopía hecha blockbuster
El mayor problema que le veo a ‘Los Juegos del Hambre’ es la falta de contundencia. Aclaro que no he leído la saga de Suzanne Collins, aunque está pendiente, así que no puedo decir si es culpa de los libros o de la película. El caso es que cuando iba leyendo las primeras críticas (se estrenó hace un mes en medio mundo) más de un crítico hablaba de las lecturas sociopolíticas que impregnan la película (como, por otra parte, cualquier obra distópica). Sin embargo todo esto, que sí asoma un poco a lo largo del metraje, está casi de adorno.
Y no estoy hablando de que sea algo sutil repartido a lo largo de la película o incluso que, como espectador, me crea o no la distopía propuesta (debe ser la distopía menos “creíble” de la historia); sino que dichos discursos o no aparecen en media película o, cuando lo hacen, son demasiado obvios (todo el tema “televisivo”). No hay término medio. Para que os hagais una idea diré que ‘Los Juegos del Hambre’ son dos películas: una con el juego en sí, con la gente matándose entre ellos y tal; y la otra con lo que pasa fuera de dichos Juegos, donde sí que se ven ciertos discursos sociopolíticos.
A lo mejor es que me viene a la cabeza ‘Battle Royale’, por ser un claro precedente de esta cinta y, además, ser bastante más redonda en este sentido… pero no puedo dejar de pensar sobre esta cuestión como perro viejo amante del género distópico que soy. Por otro lado, la verdad es que el guión está bastante bien elaborado, retratando bien a los personajes y sus circunstancias y tomando al espectador como gente con cierto cerebro capaz de sumar dos y dos (algo que no siempre pasa en los blockbusters de este tipo). La excepción vendría a ser el flashback cansino de Katniss y Peeta, me parece que con haberlo puesto una vez bastaba.
Desde el punto de vista más cinematográfico, lo que más le falla a ‘Los Juegos del Hambre’, y lo que le echaría maś en cara, es que la apoteosis final del juego no transmite emoción en ningún momento. Me daba igual que murieran, que vivieran o que cayera una bomba nuclear en medio acabando con todos los doce distritos y Capitol. Probablemente la causa de esta “apatía” venga de la falta de carisma general de los personajes.
Independientemente de esto, creo que ‘Los Juegos del Hambre’ es un blockbuster solvente y una película bastante decente. Quizás no sea todo lo buena que se proclama a los cuatro vientos pero creo que lo tiene todo para una película de estas características: ligera pero potente a su vez, bien estructurada, bien rodada (excepto en ciertas escenas de lucha que resultan algo confusas) y con un buen reparto y todo esto bien aprovechado. De momento conmigo han ganado un espectador para Sinsajo ‘En llamas’, la segunda entrega (aunque no sé si la veré en el cine) y seguramente un lector de la franquicia.
- Director: Gary Ross
- Guión: Gary Ross y Billy Ray
- Intérpretes: Jennifer Lawrence, Liam Hemsworth, Josh Hutcherson
- Género: Distopía, aventuras // 142 minutos
PD. A pesar de su duración la película se pasa volando, otro punto a favor.
Los comentarios están cerrados.