Sí amigos, ‘Supernatural’, al igual que ‘Fringe’, arrancó su nueva temporada el viernes pasado. Nada más y nada menos que la séptima temporada. Si parece que fue ayer cuando esos dos hermanos tan monos cazaban fantasmitas y monstruos de tercera. Siete años más tarde han sido capaces de afrontar todos los retos que se les han cruzado en el camino, hasta una cancelación.
The road so far…
Desde que los hermanos Winchester unieran sus fuerzas para encontrar a su padre desaparecido han pasado muchas cosas. Empezaron cazando monstruos y fantasmas que en su momento no eran moco de pavo, pero que se les empezaron a quedar pequeños. Llegaron los demonios, que eran lo más de lo más, pero luego llegaron los ángeles que eran mucho peores. Todos cayeron a los pies de nuestros valientes protas. No hace falta que diga que hasta las deidades se les quedaron pequeñas a los hermanos Winchester y sus aliados.
Entre rituales, hechizos, pintadas macarras con sangre y armas magicocelestiales, Sam y Dean han acumulado experiencia sufiente y aliados de sobra para enfrentarse a cualquier cosa que les plante cara. CUAL-QUIER-CO-SA. Nada les detiene, de una manera u otra le han partido la cara a todos los seres que les han intentado tocar las narices. En el cielo están hartos de resucitarlos, porque da igual que mueran, son tan importantes que los resucitan una y otra vez.
Tras acabar con el mismísimo Satanas en la quinta temporada, Eric Kripke, creador de la serie, anunciaba que la dejaba ahí. La cadena quería alargarla pero él tenía muy claro que había escrito cinco temporadas y que no iba a estirarla, si la cadena quería seguir la serie tendrían que hacerlo sin él. Y así fue. Creo que tomó una gran decisión, la verdad.
La sexta temporada arrancaba con alguna que otra dificultad y había tramas un poco chungas. No duró mucho, rápidamente la serie remontó de nuevo y lo que empezó un poco flojo, en pocos capítulos estaba ya al nivel que la serie nos tiene acostumbrados. Que tampoco es que ‘Supernatural’ tenga mucho misterio, pero hay que llegar a un mínimo para que los seguidores no nos aburramos.
Tras un buena buena sexta temporada donde terminaron de pegarse con las últimas criaturas y semidioses que les quedaban, llegamos a un punto donde ya no les quedaba ninguna criatura de la creación que les hiciera sombra. Por mucho que estén todo el día lloriqueando son super poderosos, ¿con quien iban a enfrentarse? Pues con ellos mismo. Ver a Castiel ponerse tonto y proclamarse como el nuevo Dios fue un final fantástico.
Tengo que decir que el primer capítulo de esta nueva temporada me ha dejado descolocadísimo, pero me ha gustado. Por un lado deshacen la liada de Castiel y le devuelven al bando de los buenos, pero por otro desatan a los nuevos malos malosos, unas criaturas que estaban antes casi del principio de los tiempos. Claro, ¿por qué no? A mi ya me vale, compro. Y lo mejor de todo es que hemos podido disfrutar durante un capitulo entero de un Misha Collins desatado, interpretando a un Castiel completamente diferente, este actor me flipa.
Esta noche tenemos ya nuevo capítulo de ‘Supernatural’ y tengo la sensación de que sea de nuevo el primero, el de la semana pasada fue tan intenso que me sentí como si estuviera viendo un final de temporada. A ver que nos deparan esta temporada los hermanos Winchester y sus molones aliados.
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